"Para muchas personas, el trabajo ha dejado de ser el lugar privilegiado desde el que articular su desarrollo personal y social”. Es una de las premisas que expone Ana Marta González, catedrática de Filosofía e investigadora del Instituto Cultura y Sociedad (ICS) de la Universidad de Navarra en su última publicación, Trabajo, Sentido y Desarrollo, un libro donde reflexiona acerca del sentido del trabajo desde la óptica filosófica.

La autora concluye que el trabajo está en crisis y ante esto “resulta oportuno reflexionar nuevamente sobre el sentido del trabajo y su lugar en nuestra vida poniendo de relieve sus dimensiones específicamente humanas, así como la relación con el descanso, el ocio y la fiesta”. 

La publicación comienza con un recorrido histórico por el trabajo en la vida humana, desde las civilizaciones orientales, el ideal clásico, la ética orgánica medieval, la edad moderna hasta la actualidad. Aborda, entre otras cuestiones, la división y organización del trabajo, la diferencia entre profesión y vocación profesional, la consideración del hogar como profesión o el nacimiento de la profesión de los negocios. En otro de los capítulos, Ana Marta González presenta el sentido del trabajo como vector humano del desarrollo sostenible.

“Una consideración integral del trabajo no debe detenerse exclusivamente en su valor de mercado”, escribe la autora, que habla de un trabajo que genera bienes relacionales y en la necesidad de encontrar un equilibrio entre el trabajo realizado y las personales capacidades creativas.

Redefinición del trabajo: cambios tecnológicos y culturales

Asegura Ana Marta González que, ligado a este momento de crisis, el mundo del trabajo se halla en plena redefinición. “Siempre se está redefiniendo, al ritmo que marca la economía: tanto porque lo hacen las necesidades como los medios para satisfacerlas. En esa línea, los cambios vinculados a las innovaciones tecnológicas, especialmente la introducción de la inteligencia artificial, han llamado particularmente la atención de los estudiosos, no solo porque amenazan algunos tipos de trabajo, mientras crean otros nuevos, sino también porque afectan significativamente al modo de organizarlo”.

Sin embargo, la investigadora muestra mayor interés por los cambios culturales, por “cómo se han modificado las expectativas que albergamos acerca del trabajo y cómo consideramos su relación con la vida buena; en qué medida lo vemos o no como un lugar en el que interseccionan persona y sociedad; si diferenciamos o no entre trabajo y empleo; cómo articulamos, personal y socialmente la relación entre trabajo, descanso, ocio…; si alcanzamos a ver la relación entre trabajo y desarrollo personal y social”, argumenta.

La publicación se enmarca en la línea de investigación Trabajo, Cuidado y Desarrollo que forma parte de la Estrategia 2025 de la Universidad de Navarra, que busca promover la investigación y el diálogo multidisciplinar en torno al papel del trabajo en la configuración de la personalidad, la cultura y la sociedad.