20000407-Un fiscal de la Audiencia Nacional aboga por reducir los trámites iniciales de la adopción y potenciar la acogida familiar

El fiscal de la Audiencia Nacional Ignacio Peláez dijo en la Universidad de Navarra que "se pueden reducir los plazos para adoptar a un niño, especialmente si acortamos los pasos iniciales". Asimismo, abogó por potenciar "el acogimiento familiar, un estatus previo que favorece la adopción". El fiscal participó en un curso monográfico titulado "Adopción: aspectos psicopedagógicos y marco jurídico", organizado por el departamento de Educación de la Universidad de Navarra.

En su ponencia, titulada "La adopción en el derecho comparado europeo", Ignacio Peláez trató "los aspectos jurídicos necesarios para tramitar una adopción internacional desde un país europeo". Actualmente, a causa del descenso de la natalidad en España, la gran mayoría de las adopciones se tramitan con otro país.

Peláez analizó las consecuencias de una mala tramitación: "Hay gente que decide adoptar un niño por su cuenta, sin contar con los organismos ordinarios. Los fracasos de este tipo de adopciones surgen principalmente por dos motivos: los padres acuden a países que no tienen firmados convenios con España; o bien, al no seguir los procedimientos normales, quieren registrar al niño en España y ven que, sin haber hecho nada ilegal, no pueden". No obstante señaló que se trata de casos "más bien aislados, ya que actualmente casi todo el mundo acude a los organismos de su Comunidad Autónoma y a las ECAI (Entidades Colaboradoras de la Adopción Internacional)". La gran mayoría de los países sólo tramita adopciones por medio de estas Entidades.

Más flexibilidad y menos burocracia

De modo esquemático, los pasos necesarios son: "Acudir a la ECAI o institución similar de su Comunidad; entregar la documentación necesaria (certificado de idoneidad, que se obtiene tras realizar una serie de entrevistas personales y después de aportar datos de tipo económico, social, etc.); contactar con el país de destino; e inscribir al niño en el registro español". El promedio de tiempo para una adopción internacional varía entre "seis meses y un año", aunque si es la primera adopción el tiempo es mayor.

Peláez subrayó que "últimamente se ha acortado mucho el tiempo de espera, aunque aún puede ser menor". Esta espera, que en ocasiones se alarga durante años, causa que muchos potenciales adoptantes se retraigan: "Es posible acortar el proceso de adopción, especialmente en los trámites iniciales, sin que tengan por qué disminuir las garantías respecto a la idoneidad de los padres". En este sentido, Peláez pidió "más flexibilidad y menos burocracia".

Otra herramienta para impulsar la adopción propuesta por Ignacio Peláez es el acogimiento familiar. "Si potenciáramos esta figura -que supone una acogida transitoria del niño-, en muchas ocasiones podría finalizar en una adopción permanente".

El fiscal de la Audiencia Nacional consideró urgente agilizar los procesos, por el número tan elevado de niños que lo necesitan. "En los países del Este, por ejemplo, Rusia y Rumania están sufriendo especialmente". Sobre este último país dijo que "resulta sangrante que tenga uno de los niveles de mortalidad infantil más elevado y surjan trabas para adoptar a esos niños".