Salma Basterra es premio extraordinario de la promoción 2019-2023 del Grado en Gestión Aplicada. Nada más terminar la carrera se incorporó como Guest Relations Executive en el hotel Kuramathi de Rasdhoo, en Maldivas. Tras algunos meses en el archipiélago índico, en la actualidad trabaja en Dubai para Bulgari Hotels & Resorts. Asegura que sus estudios y las diferentes experiencias vividas durante su paso por la Universidad de Navarra le han permitido soñar alto y desarrollar una carrera internacional.

¿Cómo terminaste en Maldivas? 

Durante el segundo cuatrimestre de cuarto realicé mis prácticas curriculares en el departamento Financiero de Garrigues. Al terminar, me ofrecieron quedarme, pero entendía que era el momento de probar un sector, el hotelero, que me había interesado durante la carrera. Así que, una vez que me gradué, comencé una búsqueda intensa. Investigué por todas partes del mundo y escribí a mucha gente. Me di cuenta que todo es posible y de que uno puede aspirar a todo lo que se proponga. Con esta mentalidad, decidí aceptar la oferta de Maldivas. Mi estancia allí me ha permitido aprender mucho culturalmente. Ha sido una experiencia única de la cual me llevo cosas muy buenas. 

Y ahora te encuentras en Dubai…

Un día abrí LinkedIn y vi una oferta de trabajo en Dubai. No intentaba cambiar de trabajo, y sin mucha certeza de qué haría, apliqué. A los días recibí un mail para realizar una entrevista y, tras hacer el proceso de selección, fui la candidata elegida. He abierto las puertas en esta ciudad en una de las empresas más lujosas del sector. Bulgari Hotels & Resort Dubai es el hotel más demandado de la cadena de Marriot; su prestigio y reconocimiento es muy alto. La gente está deseando entrar aquí a trabajar. Aproveché una oportunidad increíble para aprender de grandes profesionales. Tanto el staff como los clientes te aportan aprendizaje cada día. 

¿De qué tareas te encargas como Guest Relations Executive? 

Intento dar al cliente la mejor estancia posible tratando de superar sus expectativas. Una parte de mi trabajo consiste en estar en contacto con ellos: hago un estudio previo, les recibo, les explico el hotel y nuestros servicios, les aconsejo y hago un seguimiento de su estancia hasta cerrar su acomodación. Mi rol principal es ser su figura de apoyo, así como responsable de la gestión de clientes VIP. 

Por otro lado, también trabajo en la oficina. Utilizo las herramientas de gestión que aprendí en el Grado en Gestión Aplicada para planificar el inventario y gestionar logísticamente la relación con el cliente. Trato de anticiparme, antes de su llegada analizo si requiere algo en particular y trato de acomodar todo a su gusto. Una vez que el cliente se ha ido hago un feedback con los puntos fuertes y débiles de la estancia para mejorar; las aportaciones en optimización de procesos me han ayudado mucho a mejorar el tiempo en el trabajo.

¿Cómo piensas que te ha ayudado estudiar el Grado en Gestión Aplicada para tu trabajo? 

No hubiese podido acceder a este cargo sin el Grado en Gestión Aplicada. Adquirir conocimientos diversos y estudiar en la Universidad de Navarra me han permitido estar donde estoy. En primer lugar, por los valores de compromiso, profesionalidad, gratitud y valentía que me han dado la universidad y mis profesores. En segundo lugar, por la formación del grado. Somos un perfil muy polivalente capaz de adaptarse a cualquier situación en la que nos encontremos. 

El Grado en Gestión Aplicada te permite familiarizarte con las herramientas que las empresas utilizan. También me ha permitido tener una capacidad crítica de análisis y de evaluación de cómo trabajar una empresa o departamento y a mi cabeza siempre vienen propuestas de optimización de procesos. 

¿Cómo crees que los idiomas y las experiencias internacionales del grado te han ayudado a desarrollar una carrera en el extranjero? 

Hoy en día las empresas dan por hecho que sabes idiomas. El grado incorpora sus propias clases de idiomas y, además, asignaturas en idiomas. No solo adquirimos conocimientos técnicos de otras lenguas, sino que también aprendernos a desenvolvernos en un entorno empresarial. Por otro lado, los proyectos en equipo que en ocasiones tanto nos agobiaban, ahora sé con certeza que es la mejor manera de aplicar e interiorizar lo aprendido. 

Cuando defendimos el último proyecto en cuarto vimos cuánto habíamos crecido. Fue un momento de agradecer a cada una de las personas que han pasado por nuestra vida en esos años. Nos convencimos de que estábamos preparados para salir a “comernos el mundo”.

¿Qué otras experiencias tuviste durante la carrera?

¡Muchas! Siempre he sido una persona muy inquieta. Trato de aprovechar el tiempo y de aprender de todas las oportunidades que voy encontrando por el camino. Además de haber compaginado la carrera con la práctica profesional del esquí, las experiencias que más destaco de mi paso por la universidad son dos: mis prácticas profesionales en Garrigues, pero sobre todo mi presidencia del Management LAB, club de ISSA School of Applied Management, que me permitió organizar un encuentro con antiguos estudiantes de la Universidad de Navarra en el que participó Juan Carlos Unzué.

¿Qué les recomiendas a tus compañeros que cursan actualmente el grado?

Que sueñen a lo grande. Que se convenzan de que cuando acaban el grado tienen las herramientas necesarias para comenzar en el sector laboral: muchos conocimientos, habilidades y puertas abiertas.

Que se arriesguen porque siempre se aprende algo y a que salgan de su zona de confort. Ver sitios nuevos te abre la mente y te enriquece. Puede que a veces las cosas no salgan como las habías pensado, pero estoy segura que de todo se puede sacar lo positivo.