Maria Bikuña Izagirre ha sido estudiante de doctorado en el departamento de Ingeniería Biomédica y Ciencias de Tecnun, concretamente en el grupo de Ingeniería de Tejidos, y defendió su tesis el 22 de junio. Recientemente ha estado realizando una estancia internacional en la Universidad de Western Australia (en la ciudad de Perth).

¿Cómo surgió la opción de ir de estancia a Australia?

Tenía claro desde el inicio del doctorado que quería hacer una estancia internacional. Mi tesis consiste en crear estructuras biocompatibles que imitan un tejido ocular. Para ello utilizo la técnica del “electrospinning”. Sin embargo, quería aprender un nuevo método de fabricación llamado melt electrowriting (MEW), que se basa en el mismo principio de funcionamiento, pero te permite realizar estructuras más personalizadas. Mi director de tesis, Jacobo Paredes, me comentó que conocía un grupo en Australia liderado por una antigua profesora de la Universidad, Elena de Juan Pardo. Nos pusimos en contacto con ella y una vez establecidos los objetivos me fui para allí.

¿Qué te ha aportado esa estancia?

He estado en Perth, (Australia del Oeste) la ciudad más aislada del mundo. La siguiente ciudad más importante, Adelaide, está a 2.000 km de distancia. Estuve en el Instituto Médico Harry Perkin´s, que está vinculado con la Universidad de Western Australia. Esta estancia me ha aportado una visión más global del mundo, he conocido muchísimas culturas totalmente diferentes a las de occidente y he podido aprender mucho.

¿Qué semejanzas o diferencias ves entre el centro en el que has estado y Tecnun?

Es una pregunta difícil. Yo creo que son diferentes. Tecnun es una de las universidades más prestigiosas de España, pero Harry Perkin´s está en el top 20 de los centros de investigación médica de Australia. Trabajan varias disciplinas en conjunto desde cirujanos, biólogos, bioquímicos hasta ingenieros de distintas ramas (mecánicos, biomédicos…). Es cierto que al igual que en Tecnun, el grupo en el que estuve es pequeño (3 doctorandos y varios alumnos de grado y máster). Se centran en la fabricación de válvulas del corazón mediante MEW y trabajaban estrechamente con cirujanos y cardiólogos.

¿Crees que este tipo de estancias sirven para hacer networking y, quizá, estrechar lazos también entre universidades?

Sin duda alguna. Además de dar la oportunidad al alumno de conocer nuevos grupos de investigación y nuevas formas de trabajar, se benefician los dos grupos. En general, al hacer una estancia el centro de investigación se dedica a algo parecido y los resultados interesan a ambas partes. Por otro lado, se abre camino a nuevas colaboraciones y a que otros alumnos puedan intercambiarse.

¿Cuál ha sido tu trabajo durante estos meses de estancia?

Durante estos meses me he centrado en aprender la técnica de MEW, que como he mencionado anteriormente permite crear estructuras personalizadas a través de un G-code. Es como una impresora 3D pero se le aplica un diferencial de potencial a un polímero derretido creando filamentos del orden de la micra. Variando sus parámetros de fabricación se consiguen fibras y estructuras con distintas propiedades mecánicas/morfológicas. Después he llevado a cabo la caracterización mecánica de estas estructuras, midiendo el módulo elástico, los diámetros, poros etc. Estas estructuras a las que llamamos “scaffolds” junto con las membranas que he fabricado durante mi tesis con “electrospinning” nos permitirán probar nuevos constructos para el tejido ocular que estoy investigando.

¿Qué te ha aportado en lo personal y lo profesional?

Personalmente me ha dado una visión más global del mundo. Ha sido una experiencia muy enriquecedora, he conocido a mucha gente de todos los continentes y el shock cultural ha sido curioso. A su vez, me ha servido para aprender a estar “sola” o enfrentarme a dificultades en un país desconocido. Salir de mi zona de confort, que al final es donde verdaderamente creces personalmente. En cuanto a lo profesional, ha sido maravilloso tratar con gente de distintas disciplinas, ver en directo sus trabajos y disfrutar de las charlas que impartían. Además, he tenido la oportunidad de participar en la conferencia “ASBTE” de Australia del oeste y presentar mi proyecto. Fue una bonita forma de poner en práctica las habilidades comunicativas.

Además del trabajo propiamente dicho, ¿qué tal la experiencia de pasar cuatro meses allí?

No tengo palabras. He vuelto enamorada de Australia. La gente es maravillosa, súper simpáticos y siempre dispuestos a ayudarte. El paisaje es inigualable, cuidan muchísimo el medio ambiente, todas las playas y parques naturales estaban muy bien cuidados. La fauna es increíble, es sorprendente y precioso ver a animales tan exóticos como kanguros, kaktúas o pelícanos libres en la naturaleza.