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El papa Francisco ha nombrado a Francisco Conesa Ferrer nuevo obispo de la Diócesis de Menorca. Actualmente era párroco y rector de la Basílica de Santa María de Elche, en la Diócesis de Orihuela-Alicante. Desde 1994 era profesor asociado en la Facultad de Teología de la Universidad de Navarra. 

Francisco Conesa es antiguo alumno de las facultades de Filosofía y Letras y Teología de la Universidad de Navarra, donde “encontró excelentes maestros y mantiene aún buenos amigos”, tal y como lo asegura su biografía publicada en la web del Obispado de Menorca.

Obtuvo la licenciatura (1991) y el doctorado en Teología  (1994) con una investigación sobre la relación entre la fe y el conocimiento en la filosofía analítica contemporánea. Es además licenciado (1992) y doctor en Filosofía (1995) por el mismo centro académico. Su segunda tesis versó sobre el problema del mal en el pensamiento del filósofo Alvin Plantinga. Ambas tesis fueron publicadas por EUNSA.

Desde su etapa en la Universidad hasta su nombramiento como obispo

Desde su vuelta a la diócesis (1992) ha sido profesor de Filosofía del lenguaje y de Teología fundamental en el Seminario Diocesano de Orihuela y de Alicante. Al mismo tiempo, desarrolló su tarea pastoral en varias parroquias.

En 1998 fue nombrado vicario general de la Diócesis de Orihuela-Alicante, oficio que desempeñó hasta 2014. Durante estos 16 años acompañó a los obispos Victorio Oliver, Rafael Palmero y Jesús Murgui.

Además, el nuevo obispo de Menorca es canónigo magistral de la Catedral de Orihuela (2001) y prelado de honor del papa Francisco (2012).

De su tiempo como párroco y rector de la Basílica  de Sta. Mª  de Elche asegura que han sido “unos años maravillosos” en los que se ha sentido “muy feliz y acompañado en la fe”.