Todos somos emigrantes fuera de nuestro lugar

16 | 10 | 2025
El pasado martes 7 de octubre de 2025, el Máster en Dirección de Personas y Organizaciones (MDPO) recibió a Jordi Casas, Chief People Officer (CPO) de DKV Seguros, un profesional de los Recursos Humanos con una trayectoria internacional que abarca Asia, Norteamérica y Europa. Su experiencia diversa refleja una visión global del mundo y una profunda comprensión de las personas y las organizaciones.
La sesión titulada «Mi experiencia dirigiendo personas» combinó reflexión y realidad, filosofía de vida y gestión del talento. Casas inició su intervención con una idea poderosa: «pensar en el contacto antes de necesitarlo». Subrayó que las relaciones humanas no se improvisan, sino que se construyen con atención y tiempo. Asimismo, destacó que una de las claves para generar confianza es tratar a las personas como adultos, recordando también que «elegir es muy importante», pues implica tanto responsabilidad como libertad.
A lo largo de su charla, compartió dos frases que resumen su enfoque vital y profesional: «la formación no sirve si no hay transformación» y «todos necesitamos una caja de herramientas». Según explicó, esta “caja” no solo se relaciona con lo que se hace, sino con la forma en que uno se reta a sí mismo para alcanzar sus objetivos. Su mensaje invitó a reflexionar sobre cómo el desarrollo personal y profesional trasciende los PowerPoints o las métricas: se trata de crecer, conectar y adaptarse a los distintos entornos, tanto en el ámbito laboral como en el personal.
El ponente también reflexionó sobre la energía que cada persona proyecta: «todos tenemos luz, amor y fuerza, pero el verdadero reto está en cómo llegamos a eso y cómo conectamos con los demás desde ese punto». Añadió que cada vez que alguien da, decide; y cuando decide, empodera, aunque recordó que «sin poder, no se puede empoderar».
En definitiva, Jordi Casas transmitió un mensaje que va más allá de los Recursos Humanos: para transformar, debe existir crecimiento; y para crear cultura, es necesario contar con valores y comportamientos reales. Su discurso, directo y cercano, evidenció que estar próximo al negocio no depende de los títulos, sino de las capacidades, la empatía y la acción.
Gracias a Jordi Casas por recordarnos que las personas no se gestionan, se acompañan, y que, en este mundo global, todos somos, de alguna manera, inmigrantes buscando nuestro lugar.