María Iraburu, rectora: "Queremos formar estudiantes con vocación de servicio y capaces de ver la dimensión social de su profesión"

La elaboración de un mapa de la pobreza energética en Navarra, el asesoramiento nutricional a personas en situación vulnerable o el apoyo escolar a menores en riesgo de exclusión. Estos son algunos ejemplos de proyectos de aprendizaje-servicio (ApS), la metodología docente mediante la cual el estudiante aprende los contenidos curriculares y competencias profesionales propias de una asignatura y además, presta un servicio a la sociedad en distintos ámbitos y en colaboración con instituciones y entidades sociales. 

Con el título "El aprendizaje-servicio como impulso del compromiso social del estudiante", esta metodología ha centrado una jornada organizada en la Universidad de Navarra, que ha contado con la participación de la rectora, María Iraburu, y de la alcaldesa de Pamplona, Cristina Ibarrola. 

María Iraburu ha destacado que el aprendizaje-servicio incorpora una mirada solidaria al núcleo de la Universidad como es la docencia y la investigación. "Esto tiene como consecuencia la sostenibilidad y la permanencia del compromiso social de profesores y estudiantes", ha señalado. La rectora ha valorado la riqueza que supone a la Universidad la relación con otras instituciones, que pueden aportar su experiencia en resolver los problemas de la sociedad. En este sentido, ha abogado por "formar estudiantes con vocación de servicio y capaces de ver la dimensión social de su profesión". "Esas personas van a transformar el mundo con su trabajo", ha añadido.

La rectora ha concluido sugiriendo a los docentes presentes en la jornada, inspiración y creatividad: inspiración para impulsar iniciativas de ApS a partir de la escucha a los demás; y creatividad para detectar materias que puedan dar lugar a proyectos e ideas originales. 

Por su parte, la alcaldesa de Pamplona, Cristina Ibarrola, ha resaltado la "grata apuesta" de la Universidad de Navarra "por ofrecer una formación integral de los estudiantes, que va más allá del desarrollo del conocimiento científico y tiene una explícita vocación de servicio a la sociedad, situando la solidaridad como uno de los valores centrales".

Ibarrola ha asegurado que con metodologías como el ApS, la Universidad traspasa los límites del campus e impregna en muchos aspectos toda la sociedad pamplonesa y ha subrayado el compromiso del centro académico con Pamplona y su adhesión al pacto local por el desarrollo de la Agenda Urbana, Agenda 2030. "El papel de las instituciones que se dedican a la enseñanza debe ir más allá del talento individual de sus estudiantes, que deben encontrar en la ciudad el ámbito en el que integrar su trabajo, donde proponer soluciones a los problemas reales; y contribuir así a la formación de una ciudadanía activa, participativa y corresponsable", ha afirmado. 

A continuación, las profesoras Elena Arbués, de la Facultad de Educación y Psicología; y Roncesvalles Garayoa, de la Facultad de Farmacia y Nutrición,  han expuesto en qué consiste la metodología de ApS y lo que supone para el alumno. "Lo que nos aporta valor son las competencias y destrezas cívicas que se adquieren: la empatía, la solidaridad de conocer a personas en situaciones de vulnerabilidad, el saber comunicarse y el compromiso con el trabajo bien hecho", ha detallado Roncesvalles Garayoa. Cristina Muñoz, directora de Planificación y Diseño del campus de la Universidad, ha descrito los proyectos que se están desarrollando en el ámbito universitario y que pueden ser objeto de aplicar el aprendizaje-servicio. 

La jornada se ha completado con las intervenciones de Javier Soto, presidente de la red navarra de APS, que ha explicado la labor de la entidad;  y José Manuel Santana, pedagogo y técnico del Ayuntamiento de Pamplona, que ha descrito alguna de las experiencias de aprendizaje y servicio impulsadas desde el consistorio. "La excelencia educativa no excluye el compromiso social. Se trata de aprender mejor para ser mejor, eso significa el aprendizaje-servicio", ha dicho Soto. Por su parte, Santana ha recalcado que el servicio a la comunidad y el aprendizaje práctico no pueden ir separados. "Se trata de orientar el talento en beneficio de una comunidad", ha concluido.