Un libro analiza la política exterior americana durante la presidencia de Jimmy Carter, que marcó el cambio de relaciones entre EE. UU. e Irán
La prestigiosa editorial Palgrave Macmillan ha publicado la tesis doctoral que Javier Gil realizó en el proyecto ‘Religión y sociedad civil' del ICS, en la que analizó documentos desclasificados recientemente
La prestigiosa editorial Palgrave Macmillan ha pubicado The Carter Administration and the Fall of Iran's Pahlavi Dynasty. US-Iran Relations on the Brink of the 1979 Revolution. Se trata del nuevo libro de Javier Gil Guerrero, colaborador del Instituto Cultura y Sociedad (ICS).
El volumen se corresponde con la publicación de la tesis que Javier Gil defendió en 2014 con el título ‘Opening Pandora's Box: Jimmy Carter, The Persian Gulf and the Rise of Militant Islam (1977-1981)' (Abriendo la caja de Pandora: Jimmy Carter, el Golfo persa y el auge del Islam militante (1977-1981). La investigación fue realizada en el marco del proyecto ‘Religión y sociedad civil' del ICS.
La obra aborda el estudio de la política exterior americana durante el mandato del presidente demócrata Jimmy Carter y su relación con la revolución iraní de 1979. Javier Gil Guerrero, a través de documentos que han sido desclasificados recientemente, ofrece una nueva visión de las fuerzas que permitieron el triunfo de Jomeini, de la alterada percepción que tenían los americanos del Islam y del cambio de las relaciones entre EE. UU. e Irán.
Entre otras cuestiones, el autor analiza las diferencias entre Washington y Teherán en relación con los derechos humanos y las exportaciones de armas, las divisiones dentro de la propia Casa Blanca y la incertidumbre del Sah iraní con respecto al apoyo del presidente americano.
Un breve resumen del libro
Durante los dos primeros años de la presidencia de Carter, Irán entró en una espiral de violencia y disturbios que terminó con el exilio del Sha y el establecimiento de una República Islámica. La revolución iraní al principio fue ignorada por los diplomáticos estadounidenses y los servicios de inteligencia. Cuando Carter finalmente se dio cuenta de la magnitud de los disturbios en Irán, se negó a respaldar explícitamente la política de mano de hierro solicitada por el Sha.
El monarca iraní no estaba dispuesto a abordar con decisión las protestas sin el respaldo de Carter y llevó a cabo una política fallida que mezclaba concesiones y represión, lo que solo sirvió para posponer lo inevitable.
Las fuentes reunidas apuntan a que un proceso tardío de la liberalización política alentada por funcionarios estadounidenses solo sirvió para debilitar la autoridad del Sha.