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Alfonso V. Carrascosa: "Microbiología de los alimentos y el CSIC"
El investigador del CSIC, experto en Enología, será el ponente de la II Lección Albareda, impulsada por la Cátedra Timac Agro-Universidad de Navarra
FOTO: Quo.es
El próximo martes día 4 de abril tendrá lugar la II Lección Albareda, impulsada por la Cátedra Timac Agro-Universidad de Navarra con el objetivo de acercar al campus a figuras relevantes en el campo de la ciencia y la agrobiotecnología y que en esta ocasión tendrá como ponente al investigador del CSIC Alfonso V. Carrascosa, director del Grupo de Microbiología y Biocatálisis de los Alimentos del Instituto de Investigación de Ciencias de la Alimentación
Carrascosa, doctor en Ciencias Biológicas por la Universidad Complutense, ha colaborado con distintas instituciones relacionada con la seguridad alimentaria, como ENAC, AENOE o CDTI. Asimismo, es coautor de varias patentes transferidas a empresas, más de cien artículos científicos en revistas y de varios libros.
Premio Candia y Medalla de Oro al Mérito de la Investigación Enológica en 2007, también recibió el Premio de la Real Academia Gallega de Ciencias 2009 y el Premio Internacional de Enología OIV en 2011.
Precisamente su conferencia, titulada “Microbiología de los alimentos y el CSIC”, abordará –de un modo divulgativo y en un tono apto para todos los públicos- su trabajo como enólogo y como experto en seguridad alimentaria y Microbiología.
Por último, Carrascosa es autor de varios libros entre los cuales destacan “Los microbios que nos comemos”, “Molecular wine Microbiology” o la biografía del que fuera presidente del CSIC “José Ibáñez Martín y la ciencia española: el Consejo Superior de Investigaciones Científicas”.
Las Lecciones José María Albareda llevan el nombre del científico de origen aragonés que sentó las bases de las ciencias del suelo y la Agrobiología en España. Albareda fue también el primer secretario general del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), desde 1939 hasta 1966. Al frente del Consejo se encargó de coordinar y promover la investigación, y de alentar nuevas vocaciones científicas en los jóvenes mediante la creación de centros de investigación por toda España. Albareda fue, además, rector de la Universidad de Navarra tras su etapa como Estudio General, entre 1957 y 1963.