Monzerrath Gutiérrez Becerra ha cursado el Máster en Derechos Humanos durante el curso 2020-2021. Su interés concreto en los derechos de los niños migrantes y el papel que en ellos desempeñaba el Derecho Internacional, le llevaron a una investigación que desarrolló en su Trabajo Fin de Máster. Su inquietud la condujo a una experiencia en la Organización Internacional de Migraciones (OIM), que le llevó hasta México, a la frontera de Juárez.

En la siguiente entrevista la alumna de la Facultad de Derecho nos cuenta su experiencia.

- ¿Cómo conociste la oportunidad de trabajar con la OIM?
Al inicio del Máster tienes la opción de seleccionar un tema de interés que tenga relación con los Derechos Humanos con el fin de trabajar en tu TFM. A mí me llamaba mucho la atención el tema de los derechos de los niños y, en especial, de los niños migrantes y el papel que tenía el Derecho Internacional en este tema. De este modo, durante mi investigación iba conociendo a distintos actores claves a nivel nacional e internacional involucrados en el tema y uno de ellos era la OIM, puesto que diversos documentos citaban a dicha organización. En consecuencia, me metí a su página web para conocer mejor a la organización y terminé aplicando a sus vacantes.

- ¿Con qué expectativas llegaste a la frontera de Juárez?
Recuerdo que llegué en un punto clave de la política migratoria de la frontera sur de Estados Unidos y norte de México, dado que todas las personas migrantes que estaban bajo el Programa de Protección a Migrantes (MPP) podían cruzar a Estados Unidos y continuar su proceso de asilo en Estados Unidos. Por ello, mis expectativas eran que iba a estar en el terreno directamente con las personas migrantes en campamentos instalados y que iba a ver distintos actores internacionales en dicho campamento. Y así fue, ya que allí están trabajando en conjunto muchas organizaciones como la Cruz Roja, Unicef, Las Américas, Servicio Jesuita a Migrantes (SJM), OIM, ACNUR y otros socios implementadores como HIAS y la Jugarreta, pero lo interesante es observar toda la logística y acuerdos que se requieren para responder a situaciones de emergencia.

- ¿Qué sabías de ello y cuál iba a ser tu trabajo allí?
Sabía que por el alto número de personas migrantes que estaban cruzando la frontera se requerían muchas personas en el terreno, pero durante la entrevista me comentaron que mi principal función era estar a cargo de unos reportes mensuales, lo cual me interesó porque iba a poder seguir investigando, poder entrevistas y escuchar a las personas migrantes y continuar escribiendo.

- ¿Qué te atrajo del proyecto?
Tener la oportunidad de conocer el trabajo de alguna de las agencias de Naciones Unidas para poder entender su actuación ante emergencias y cómo aportan en la defensa de los Derechos Humanos. También estaba interesada en seguir escribiendo, investigando y formar parte del mundo migratorio.

- ¿Con qué te has encontrado?
Me he encontrado con que el tema es más complejo de lo que imaginaba, puesto que la capacidad de actuación de un organismo internacional en temas nacionales es limitada. Es por ello que constantemente hay diálogos entre sociedad civil, organismos internacionales y gobierno nacional para poder llegar a implementar un proyecto.

- ¿Cuál ha sido el mayor reto al que te has enfrentado?, ¿y la mayor dificultad?
Considero que ha sido difícil visitar distintos albergues en donde las personas comparten contigo su experiencia y trayectoria migratoria y no les pueda dar una solución inmediata, porque tienen que esperar a que su caso sea gestionado por el gobierno de Estados Unidos..

- ¿Cómo es tu día a día allí?, ¿qué trabajos desempeñais?, ¿cuál es el papel de la OIM en la zona?
Todos los días cambia porque la migración es un tema que está en constante movimiento, lo cual me gusta porque constantemente hay que estar investigando sobre decisiones migratorias por parte del gobierno mexicano y estadounidense, así como de casos de personas migrantes.

Sin embargo, mi principal actividad es redactar el reporte mensual de la oficina de Ciudad Juárez, el cual consiste en informar el trabajo realizado por cada programa durante el mes al jefe de misión y al personal que trabaja en las oficinas de Ciudad de México.

Por otra parte, he estado involucrada en otros proyectos como visitar distintos albergues aplicando encuestas y participando en actividades psicosociales. Asimismo, me he involucrado en un proyecto de gobernanza en el centro de la ciudad, para el cual he asistido a distintas reuniones con académicos, organizaciones internacionales, sociedad civil y empresarios.

- ¿De qué manera te han servido los conocimientos adquiridos en el Máster?
Los conocimientos adquiridos en el Máster me permitieron incorporarme al mundo de los Derechos Humanos con mayor facilidad porque cuando llegué mi equipo de trabajo ya manejaba diversos términos jurídicos que pude entenderlos gracias a clases que tuve en el máster o que había investigado para el TFM. También la capacidad de análisis, redacción e investigación adquiridas durante mi estudio en la Universidad me han permitido dar resultados en el trabajo y aportar positivamente al equipo.

- ¿Qué te ha aportado esta experiencia?
Llegar a entender con mayor profundidad el tema, porque es muy diferente leer los casos de violaciones de Derechos Humanos a tener a la persona frente a ti contándote sus experiencias . Igualmente, tener la oportunidad de conocer a profesionales en el tema que comparten sus conocimientos, su pasión e ideas para implementar proyectos sociales es lo que me ha llenado de placer. Dentro de una de mis mejores experiencias que tuve fue cuando mi jefe me invitó a comer con UNICEF y pude conocer a Isabel Velasco, una de las mujeres que estuvo involucrada en las reformas constitucionales sobre los derechos de los niños, niñas y adolescentes migrantes y en la creación de la Ruta Migratoria para la protección de los niños migrantes.

- ¿Qué te gustaría hacer en el futuro?
Me gustaría seguir aprendiendo e involucrarme en el tema migratorio con mayor profundidad. Para ello, he estado revisando posibles vacantes en otras organizaciones internacionales. También apliqué y fui aceptada en un voluntariado con Las Américas, una organización no gubernamental de Estados Unidos. Me llama mucho la atención su trabajo porque es un grupo de abogados que han gestionado varios casos bajo Título 42 ante distintas Cortes en Estados Unidos y quiero aprender de ellos, con el fin de poder ayudar de otra forma a las personas migrantes.