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Miguel Esteban (1992) de Logroño, se graduó en Arquitectura por la Universidad de Navarra en junio de 2016. Poco después de defender su Proyecto Fin de Grado (PFG), que estudia la posibilidad de un cambio en el sistema de regeneración urbana en China, y tras varias estancias en este país durante el proceso, le pidieron que su PFG estuviera expuesto en el pabellón principal de la Beijin Design Week. Ganador de varios premios de fotografía, este riojano apasionado por el urbanismo cuenta cómo surgió la oportunidad de este proyecto y su desarrollo.

“Desde Pekín, me pidieron que el proyecto final de carrera formara parte de la Beijing Design Week, una de las ferias de diseño mas importantes de China que se celebra cada año en octubre y que se utiliza como herramienta de regeneración urbana de diferentes zonas en la ciudad. Para ello, construimos un pequeño prototipo del proyecto que fue expuesto con el resto del trabajo en el pabellón principal (siendo el único arquitecto español invitado a participar en ese pabellón)", explica Miguel. 

"Mi interés por el diseño urbano empezó en el verano de 2012, cuando junto a dos compañeros montamos un proyecto de educación para la salud que mandamos a la Universidad Nacional de Piura en Perú, que decidió subvencionarnos. También recibimos ayuda de la beca Global Internship Program de Caja Rural. Lo interesante de este proyecto fue el entendimiento de la arquitectura y el planeamiento urbano como un elemento clave para el desarrollo y su impacto en otras disciplinas", subraya. 

Según afirma Miguel, de esta experiencia, presentaron una serie de fotografías que recibieron varios premios y fue expuesta en varias galerías y ferias de arte, como Artefacto Logroño, donde les invitaron a dar una ponencia sobre el trabajo realizado, y a partir de la que la directora de Arteaga Residencia Internacional de Artistas se puso en contacto con ellos. 

"A partir de ahí, en 2013, comenzó la primera experiencia en China, becados por la galería para desarrollar un proyecto de investigación sobre la densidad urbana en China que completaríamos durante los siguientes dos años viajando por Asia. Desde la frontera de Pakistán, pasando por India, Nepal y Tibet hasta China, y el año siguiente por Rusia, Siberia y Mongolia, con un proyecto más complejo de fotografía que trabajaba las relaciones entre distintos esquemas sociales y su consecuente forma arquitectónica y urbana.

Durante este tiempo, el interés por el estudio de la ciudad fue creciendo, así como la fascinación por las posibilidades que las nuevas tecnologías están llevando a la profesión. Por eso, en 2015, y durante el primer semestre del proyecto de final de carrera, decidí pasar medio año en Pekín, participando en un programa de investigación en la Universidad de Tsinghua (una de las mas importantes del mundo en este campo) y la AA Architectural Association, sobre la importancia de aplicar nuevas tecnologías digitales al estudio de la ciudad", explica el antiguo alumno de la Escuela.

"Plasmar en el proyecto fin de grado mis inquietudes de investigación, apoyado con la beca de iniciación a la investigación que me dio la Escuela de Arquitectura de la Universidad de Navarra, me ha ayudado mucho en lo que he seguido haciendo y me permitió acceder este año a uno de los programas de postgrado con más relevancia internacional en este tema en La Bartlett, UCL en Londres, donde estoy ahora estudiando la importancia de la introducción de tecnologías digitales en la arquitectura y su efecto para la ciudad, en un programa que reúne a alumnos de todo el mundo para que piensen y debatan sobre el futuro del diseño urbano y su impacto para la sociedad", concluye el arquitecto.