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"Si aprendemos cómo fortalecer las colaboraciones entre los profesionales de paliativos podremos promover mejores cuidados"

Jeroen Hasselaar es coordinador del proyecto europeo InSup-C, en el que participan el Programa ATLANTES del ICS y otros 10 socios de Europa y EE. UU.

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FOTO: Macarena Izquierdo
11/11/15 12:26 Macarena Izquierdo

El proyecto de investigación ‘Integrated Palliative Care – Insup-C', que financia la Unión Europea, se puso en marcha en el año 2013. Cuenta con 11 socios, uno en EE. UU. y diez en Europa, entre los que se encuentra el Programa ATLANTES del Instituto Cultura y Sociedad de la Universidad de Navarra.

Jeroen Hasselaar, coordinador del proyecto, repasa en esta entrevista algunas novedades y cuestiones de interés sobre el proyecto con motivo de la asamblea general de 2015, que se celebró en la Universidad de Navarra los días 9 y 10 de noviembre.

Uno de los principales objetivos de InSup-C es conseguir unos cuidados paliativos integrados. ¿Por qué es importante esto?

Cuando hablamos de cuidados paliativos integrados nos referimos a que una persona recibe el cuidado adecuado, en el lugar correcto, por el cuidador apropiado y en el momento oportuno. Existen muchas definiciones, pero esta es más o menos la que recoge todo lo principal.

Desde InSup-C buscamos diferentes aspectos de integración, pero nos centramos sobre todo en la integración de paliativos en tratamientos del cáncer o en enfermedades crónicas.

Otro nivel de integración hace referencia a cómo los cuidadores profesionales trabajan juntos y establecen  colaboraciones entre sí. Además, las diferentes organizaciones de atención médica también participan en esta idea de integración.  

¿Cuál es la situación actual de los cuidados paliativos en Europa?

Podemos decir que los cuidados paliativos en Europa se están desarrollando y que se están haciendo muchos esfuerzos para ello. La Asociación Europea de Cuidados Paliativos cuenta ya con 31 países miembros y mantiene conectados a todos estos países europeos en la temática de los paliativos. Esta asociación organiza congresos y otras actividades con el objetivo de poner en contacto a sus miembros y poder aprender unos de otros, presentar nuevas formas de suministrar cuidados paliativos, compartir resultados de investigaciones… La celebración de esta reunión aquí, en la Universidad de Navarra, es un buen ejemplo para ilustrar que este tipo de reuniones está creciendo.

Si bien aumenta el interés, también crece el número de personas que necesita cuidados paliativos; por ejemplo, cada vez hay más casos de cáncer. Los pacientes con enfermedades crónicas o que atraviesan etapas difíciles de su enfermedad necesitan apoyo para sobrellevar los síntomas y el dolor. Por lo tanto, hay un incremento en la conciencia y el interés por los paliativos pero también en las necesidades y, aunque se haya avanzado bastante, aún queda mucho trabajo que hacer.

¿Cuáles son los resultados más destacados que se han obtenido con el proyecto hasta el momento?

El proyecto aún no ha terminado, por lo que es difícil señalar cuáles son los resultados más destacados. Hasta el momento, estoy orgulloso de que en el proyecto se está tratando de combinar investigaciones basadas en entrevistas con pacientes, con los médicos, con los cuidadores… Se trata del nivel más básico, donde ocurre todo.

En concreto, hemos realizado el estudio en cinco países -Bélgica, Hungría, Holanda, Alemania  e Inglaterra- con el objetivo de ver qué podemos aprender unos de otros. Con las entrevistas, estamos intentando detectar las principales similitudes y diferencias entre países para poder realizar comparaciones.

En el Instituto Cultura y Sociedad colaboramos junto con Carlos Centeno  para hacer una descripción de cómo mejorar la integración de los cuidados paliativos en los sistemas de salud, lo que también supone una parte importante del proyecto.

¿Qué impacto social pueden tener este tipo de proyectos?

Lo importante es que al final estamos más concienciados de que existe una necesidad de cuidados paliativos y somos más conscientes de todo lo que es necesario dentro de los cuidados que reciben los pacientes, ya que involucran a oncólogos, enfermeras… Si aprendemos cómo se pueden fortalecer estas colaboraciones podremos promover unos mejores cuidados. Esperamos que este proyecto contribuya a mejorar el cuidado de los pacientes de paliativos.

¿En qué medida un proyecto como este puede contribuir a impulsar los cuidados paliativos alrededor de todo el mundo?

InSup-C es un proyecto europeo, por lo que nos centramos sobre todo en Europa, pero tenemos la esperanza de que sirva también para muchos otros países o personas que necesiten cuidados paliativos. 

En la actualidad, estamos intentando desarrollar un modelo e-learning para extender los resultados del proyecto y para que todos aquellos que estén interesados puedan tener acceso a ellos. También tenemos en mente la publicación de un libro. Por último, creo que con nuestra colaboración con la OMS y la Asociación Europea de Cuidados Paliativos también estamos ayudando a mejorar el desarrollo y la promoción de los cuidados paliativos. 

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