Sinastría astrológica con los horóscopos de Cristo

Uno de los elementos iconográficos más curiosos de esta portada lo constituye la sinastría astrológica de los horóscopos del nacimiento y muerte de Cristo, esculpida por Juan Ochoa de Arranotegui en los casetones del intradós del arco de la puerta de ingreso. Esta iconografía, identificada por el Dr. Esteban Lorente, se basa en el comentario de Jerónimo Cardán al Tetrabiblos de Cl. Ptolomeo, publicado en 1554. De esta forma, partiendo del lado derecho, y de abajo a arriba, siguiendo la dirección contraria a las agujas del reloj, vemos representadas en los doce casetones varias constelaciones: 1º Piscis, como un niño sentado en un trono; 2º Marte con el sol a sus píes; 3º la Luna en eclipse, como una mujer con el pelo desmadejado con un dragón a sus pies; 4º Orión, como un guerrero con escudo y maza; 5º Vía láctea como ninfa sobre las aguas, en forma de mujer que sostiene una guirnalda vegetal y tiene los pies sobre las aguas; 6º Géminis?, como mujer desnuda entre querubines y bajo ella un busto femenino; 7º Saturno, como gigante con bastón en la mano y cráneo a sus píes; 8º Berenice, como mujer con la cabeza rapada enmarcada por un ara y una hoguera; 9º Virgo, como una mujer con la mano derecha en el pecho y la izquierda señalando al suelo; 10º la Luna sobre la constelación de Hidra, representada como una mujer que pisa la cola de la hidra, cuyo cuerpo se ha perdido, que tiene la cabeza apoyado en un árbol; 11º Ofiuco, en el que vemos un hombre musculado luchando con dos serpientes; y 12º Acuario, en forma de un niño con dos cráteras, Ganímedes con los jarros del templo de Júpiter, alusión al punto astrológico denominado “La parte de la Fortuna”.