Villava: un enigma heráldico

A un lado de la calle Mayor se sitúa la sede del Ayuntamiento de Villava, un edificio imponente y cúbico de zócalo de sillar y resto de ladrillo, con cadenas de sillar en las esquinas y circundando los vanos. Su fachada se articula en tres niveles y ático, separados por cintas planas; el primero posee tres puertas adinteladas, mientras que los dos siguientes poseen balconadas, el primero voladas, y el segundo, rasgadas y sin vuelo. Corona el ático, configurado por cinco pequeñas ventanas cuadrangulares. Responde más a la tipología de casa señorial que a la de consistorial.

Destaca en el conjunto la heráldica, pues en el segundo piso parece ser se reaprovecharon dos escudos del primigenio ayuntamiento: el primero, de 1545, con las armas de Villava, una estrella de ocho puntas surmontada por un creciente de plata, y las de Navarra, sobre una cartela de cueros retorcidos, en la que campean una guirnalda y dos cabezas de querubines, muy deterioradas; el segundo, de 1779, sigue la misma iconografía y disposición, aunque sin incorporar los dos últimos elementos. Además, en el tercer nivel y presidiendo la edificación, un escudo barroco con yelmo por timbre y mascarón inferior, que no porta las armas de la villa y sin identificar, que quizás haga referencia al primigenio poseedor del inmueble.