María Jesús Moreno, Catedrática de Fisiología e Investigadora del Centro de Investigación en Nutrición. Facultad de Farmacia y Nutrición
El sistema de reciclaje de las células
El Premio Nobel de Medicina 2016 ha sido concedido al Dr. Yoshinori Ohsumi por sus descubrimientos relativos a los mecanismos implicados en la regulación de la autofagia celular.
Pero, ¿qué es la autofagia, y por qué este proceso es tan relevante para las células, y en definitiva para el organismo y la salud? El concepto de autofagia se introdujo en los años 60 para definir un proceso por el que las células pueden degradar/”comer” (fagia) sus propios residuos (auto) a través de lisosomas. El sistema de autofagia ayuda por tanto a las células a degradar los productos de deshecho y limpiarse interiormente, eliminando residuos que pudieran resultar tóxicos. La autofagia supone además un sistema dinámico de reciclaje para la renovación y la homeostasis celular.
Puede decirse que la autofagia es fundamental para proteger a la célula de situaciones de estrés. Así, las células ponen en marcha el proceso de autofagia cuando necesitan obtener energía en situaciones de inanición. También la autofagia se ha relacionado con el sistema inmune, ya que se ha visto que las células utilizan la autofagia para deshacerse de los patógenos durante las infecciones bacterianas o víricas. La autofagia se ha descrito también como un sistema de control de calidad que permite a las células deshacerse de aquellas proteínas u orgánelas defectuosas que se producen durante los procesos de envejecimiento celular.
Hoy en día sabemos que el correcto funcionamiento de la autofagia es fundamental para prevenir que las células normales se vuelvan cancerosas. Asimismo, los defectos en la autofagia se han relacionado con el desarrollo de diversas patologías tales como la diabetes, el hígado graso, ciertas cardiopatías y miopatías, así como con las enfermedades neurodegenerativas. Por ejemplo se han observado alteraciones de proceso autofágico en la enfermedad de Parkinson, de alzhéimer, en la esclerosis lateral amiotrófica y en la enfermedad de Crohn.
Las investigaciones del Dr. Ohsumi en relación a la autofagia han sido pioneras y sus diseños experimentales han resultado fundamentales para poder identificar los genes/proteínas implicados en el funcionamiento del proceso autofágico en las células, tal y como reconoce la concesión del premio Nobel.
Además, estas investigaciones resultan críticas en la búsqueda de polimorfismos en genes relacionados con la autofagia que pudieran predisponer al desarrollo de algunas de las patologías anteriormente mencionadas.
Sin duda este reconocimiento realza la importancia de una investigación básica de excelencia que permite desentrañar los mecanismos implicados en las patologías y la identificación de nuevas dianas terapéuticas.