‘Anuario de Historia de la Iglesia’ dedica un monográfico a san Juan de Ávila en su nuevo volumen

La revista Anuario de Historia de la Iglesia, editada por el Instituto de Historia de la Iglesia de la Facultad de Teología de la Universidad de Navarra, dedica la sección de ‘Estudios' de su nuevo volumen a san Juan de Ávila. En el número colaboran algunos de los principales especialistas sobre la figura y doctrina del santo, que el Papa Benedicto XVI proclamará Doctor de la Iglesia Universal el próximo 7 de octubre. 

"San Juan de Ávila entendió bien que Dios llama a la santidad a todos. Y a todos atendió, entregando su vida sacerdotal con abnegación y alegría. Y a todos infundió la convicción de que la clave radica en la correspondencia al Amor de Dios", destaca en la presentación Fermín Labarga, profesor de Historia de la Iglesia Moderna y especialista en temas relacionados con la piedad popular y el asociacionismo, tanto de clérigos como de fieles.   

En primer lugar, María Encarnación González Rodríguez, directora de la Oficina para las Causas de los Santos, presenta en el artículo ‘San Juan de Ávila: de maestro a doctor' el proceso seguido hasta alcanzar hasta alcanzar el juicio favorable de las Congregaciones de la Fe y de las Causas de los Santos.

A continuación, se incluye ‘La figura histórica de san Juan de Ávila, doctor de la Iglesia, y su incidencia', de Juan Esquerda Bifet, profesor de la Facultad de Teología del Norte de España (Burgos) y catedrático emérito del Pontificio Colegio Urbano de Roma. El texto se centra en la incidencia de la doctrina avilista respecto al ministerio sacerdotal, cuya influencia se ha dejado sentir a lo largo de los últimos siglos, singularmente en España, donde es patrón del clero secular español.

Influencia del santo hasta la actualidad

Francisco Martín Hernández, profesor emérito de la Universidad Pontificia de Salamanca y editor de las obras del santo, es el autor de ‘¿Fue erasmista san Juan de Ávila?', donde trata de esclarecer si se puede hablar o no de una impronta erasmista en la doctrina del nuevo Doctor de la Iglesia.

Asimismo, Rogelio García Mateo publica ‘San Juan de Ávila, maestro de oración', un estudio que se acerca a la figura del santo desde esa perspectiva. "Tras experimentar en profundidad el misterio de Cristo, se esforzó en ayudar a otros muchos, de toda clase y condición, a crecer en el trato con Dios hasta convertirse -en palabras de León XII- en un consumado ‘Maestro por su arte peculiar de la dirección espiritual'", apunta el profesor Labarga.

Por último, Fidel González Fernández, profesor en las universidades Urbaniana y Gregoriana de Roma propone la figura del santo como ‘Una gracia oportuna en una época de crisis y conflictos'. Según apunta Fermín Labarga, el nuevo doctor "puede ser considerado como verdadero reformador de la Iglesia de su tiempo, a la que amó con pasión y a la que mostró en toda ocasión fidelidad inquebrantable. Su doctrina teológica, anclada en la mejor tradición paulina, sirvió para despertar a su alrededor anhelos de santidad y esfuerzos intelectuales de primer orden. Su influencia se extiende a lo largo de los siglos y llega hasta el momento presente".