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“El porcentaje de sobrepeso infantil en España es en torno al 23%”

Entrevista a Nerea Martín Calvo, directora del proyecto SENDO que investiga el efecto de la dieta y el estilo de vida sobre la salud en el niño y adolescente

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Nerea Martín Calvo, directora del Proyecto SENDO FOTO: Manuel Castells
26/02/18 14:07 Patricia Sáinz

El Proyecto SENDO es una iniciativa puesta en marcha en el departamento de Medicina Preventiva y Salud Pública de la Universidad de Navarra gracias a la colaboración con pediatras de Atención Primaria del Servicio Navarro de Salud. Su objetivo es investigar el efecto de la dieta y el estilo de vida sobre la salud en el niño y adolescente. En esta entrevista hablamos con Nerea Martín Calvo, directora del programa.

¿Cuál es la situación de obesidad infantil en España? ¿Podría decirse que tendríamos que estar "en alerta"?

La obesidad infantil es un problema de salud pública mundial. Su asociación con otras enfermedades, tanto en la niñez como en la vida adulta, así como su elevada prevalencia hacen que sea imprescindible intervenir para diseñar mejores estrategias de prevención.

El estudio más reciente en la población pediátrica (Aladino 2015), utilizando los criterios de la OMS, señala que el porcentaje de sobrepeso infantil en España es entorno al 23% y el de obesidad infantil se encuentra entorno al 18%.

¿En alerta? ¡Mega-alertados! La obesidad no solo tiene repercusiones importantes en la infancia, sino que además se asocia a un mayor riesgo de convertirse en un adulto obeso, con todo lo que eso puede conllevar: diabetes tipo II, hipertensión, enfermedad cardiovascular, depresión…

¿Cómo surge la idea del Proyecto SENDO y cuáles son sus objetivos?

La idea surgió cuando yo trabajaba como pediatra en un ambulatorio y me di cuenta de la necesidad de estudiar el efecto de la dieta y los estilos de vida durante la infancia a corto plazo en la salud del niño y, más a largo plazo, en el adolescente. En España no existe ningún estudio de este tipo. El estudio más parecido es el de la cohorte INMA, que se centra más específicamente en el efecto de exposiciones medioambientales.

Sabemos que cualquier acción investigadora conlleva una cierta intervención sobre la población, que, al saberse estudiada, puede adoptar dietas o comportamientos más saludables. Aunque nos alegramos de que los participantes opten por un estilo de vida más saludable, esa acción preventiva no es el objetivo principal de nuestro estudio. El proyecto SENDO nación para investigar de forma rigurosa y obtener evidencia de calidad que sirva para apoyar o refutar los consejos sanitarios que se están dando desde hace tiempo y no parecen estar resolviendo el problema.

Se trata de un proyecto llevado a cabo gracias a la colaboración entre Universidad de Navarra y Servicio Navarro de Salud, ¿en qué consiste esta colaboración?

El proyecto SENDO es resultado del trabajo conjunto del Departamento de Medicina Preventiva de la Universidad de Navarra y el Servicio Navarro de Salud que cuenta con un equipo multidisciplinar de nutricionistas, pediatras y epidemiólogos que han colaborado en investigaciones importantes como el SUN (Seguimiento Universidad de Navarra) y el ensayo PREDIMED (PREvención con Dieta MEDiterránea).

Los pediatras del Servicio Navarro de Salud colaboran en el reclutamiento de nuevos participantes y en la confirmación de la información recogida en los cuestionarios. Esta colaboración nos permite obtener datos más precisos, que posteriormente ayudarán a nuestro estudio.

¿Cuáles fueron de forma general los primeros resultados que obtuvisteis? He entendido que ahora estáis buscando más voluntarios, ¿cuál es la cifra actual y a cuál queréis llegar? ¿Hay algún estudio parecido en España?

Los resultados del estudio piloto mostraron que el 89% de los participantes se mostraban contentos a la hora de comer, pero que sus hábitos no llegaban a cumplir la mayoría de las recomendaciones dietéticas. En la fase piloto obtuvimos una visión general de los patrones dietéticos y de las enfermedades más frecuentes de los niños navarros. Sin embargo, para poder identificar las causas de las enfermedades y diseñar estrategias de prevención necesitamos recoger información de los participantes a lo largo de toda su infancia y adolescencia.

En el proyecto SENDO buscamos nuevos participantes de forma permanente. Cuantos más, mejor.

Como ya he dicho, el estudio más parecido sería el de la cohorte INMA, que es una cohorte cerrada, es decir, que no busca nuevos participantes. Los estudios de cohortes en poblaciones infantiles existen en otros países como Estados Unidos, Chile, Australia y Holanda desde hace muchos años. Puede decirse que SENDO es un estudio pionero en España porque la mayoría de los estudios sobre dieta y estilos de vida son transversales, es decir, sin seguimiento en el tiempo. Esos estudios son relativamente rápidos, fáciles y baratos, pero la calidad de la evidencia que permiten obtener es mucho menor que la que perseguimos nosotros. Por la experiencia de otros países sabemos que la información que pueden llegar a manejar los estudios de grandes cohortes es mucha y de gran valor si cuentan con un buen diseño y un seguimiento adecuado de los participantes. Como resultado, las conclusiones de este tipo de estudios suelen ser de gran relevancia científica.

¿Cuáles son las claves de un estilo de vida saludable o cómo conseguirlo? ¿Qué deben tener en cuenta los padres al inculcarles esto a sus hijos? 

Para tener un estilo de vida saludable hay que cuidar tres áreas: la salud física, la salud emocional y el entorno social. Estas tres áreas están muy relacionadas y podemos conseguir un impacto positivo en las tres si cuidamos:  

  1. La dieta: debemos seguir una alimentación variada, rica en frutas y verduras, cereales integrales. La dieta Mediterránea es un ejemplo demostrado de dieta saludable. Además de lo anterior, la dieta Mediterránea se caracteriza por un consumo relativamente elevado de grasas, pero de grasas buenas, procedentes del aceite de oliva, los frutos secos y el pescado. Además, es importante reducir el consumo de alimentos procesados, las harinas refinadas y los azúcares añadidos.

  2. Ejercicio físico: se recomienda la realización de, al menos 150 minutos a la semana de actividad física moderada. La clave está en incorporar la actividad física a nuestras actividades cotidianas: andar más, subir las escaleras, etc.

  3. Cuidar nuestro equilibrio psicológico y emocional: los anglosajones se refieren a esto con el término de Mindfullness, que consiste en la concentración de la atención y la conciencia.

  4. Cuidar nuestro entorno social: el ser humano es un ser social por naturaleza. El establecimiento y cuidado de relaciones interpersonales sanas y equilibradas es fundamental para nuestra salud.

El estilo de vida mediterránea, que es mucho más que la dieta mediterránea, recoge estos aspectos. En los últimos años estamos viendo un auge de este estilo de vida que cada vez se asocia a mayores beneficios sobre la salud.

¿Cuándo esperáis publicar los siguientes resultados? 

Estamos trabajando en varias líneas de investigación especialmente sobre la lactancia materna, y confiamos en publicar nuestros resultados pronto. Recientemente hemos publicado un artículo que estudia la asociación entre el consumo de productos lácteos y las infecciones respiratorias [Peñafiel Freire DM, Martín Calvo N, García Blanco L, Zazpe I, Álvarez Zallo N, Moreno Galarraga L. Asociación del consumo de lácteos con las infecciones respiratorias: ¿mito o realidad? Rev Pediatr Aten Primaria. 2018;(epub: 15/Feb/2018)].

Además, SENDO tiene un objetivo divulgador y queremos acercar a las familias el resultado de nuestras investigaciones en un lenguaje más claro y sencillo a través de un pequeño boletín informativo. Al fin y al cabo, los niños y las familias son el componente más importante de SENDO y les debemos nuestra investigación a ellos.

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