2015_01_19_CIE_Costa_rica

Francisco Durán Vian estudió Ciencias Ambientales en la Universidad Europea Miguel de Valladolid y realizó el Máster en Biodiversidad, Paisajes y Gestión Sostenible en la Universidad de Navarra. Tras terminarlo, su "pasión por la naturaleza y los animales" le llevaron a Costa Rica, uno de los puntos calientes de la biodiversidad mundial.

Tal y como cuenta, "sentía la necesidad de tener un contacto directo y real con este mundo, por eso me puse a buscar organizaciones en la conservación de la naturaleza en ese país". Así, su primera parada fue el proyecto de la Asociación de Voluntarios para el Servicio en Áreas Protegidas llamado "Quelonios del Caribe" dedicado a la conservación de las tortugas marinas.

Se trata de una reserva con gran afluencia de la tortuga baula, en peligro de extinción. Allí trabajó en diversas labores de mantenimiento del proyecto y aprendió algunas nociones sobre estos animales. "No teníamos electricidad ni agua corriente y comíamos el pescado que cogíamos en el río o en el mar", explica.

Tras 15 días allí se desplazó al Proyecto Playa Buenavista, otra iniciativa para la conservación de tortugas. Allí tuvo contacto con estos seres vivos y con el mundo de la investigación. "Esa playa recibe cuatro especies de tortuga. Cada noche nacían aproximadamente 200 neonatos. Nuestro objetivo era localizar a la tortuga y marcarla, anotar la fase de la anidación en la que se encontraba, condiciones ambientales, lugar, hora, tiempo que duraba la anidación y recoger los huevos que ponía para llevarlos al vivero". "En Costa Rica se sigue comerciando ilegalmente con la carne y los huevos de tortuga. Cada noche encontrábamos ladrones de huevos (hueveros), por lo que debíamos de ser más rápidos que ellos para encontrar los nidos", añade.

En el Centro de Rescate "Las Pumas"

Por último, su experiencia en Costa Rica finalizó en el Centro de Rescate de Fauna Silvestre "Las Pumas" cuya misión es rescatar a aquellos animales silvestres que han resultado heridos por diversas razones o que se encuentran en casas, hoteles… víctimas del comercio ilegal. "Más tarde, algunos se exhiben para, de paso, impartir algunas nociones de educación ambiental".

"Allí colaboré estrechamente con la veterinaria del centro y realizamos labores de rescate y liberación. Otra de mis funciones fue la de atención al público lo que amplió mis conocimientos sobre los animales expuestos". 

Tras valorar su paso por el Máster en Biodiversidad, Francisco Durán señala cómo "gracias a los conocimientos que nos han transmitido he sido capaz de desenvolverme en situaciones adversas dentro del campo medio ambiental". Asimismo, destaca el apoyo de los distintos profesores, "del cual estoy muy agradecido".