“Las actividades están encaminadas a que los profesores enseñen mejor, disfruten más y que los alumnos aprendan”
Entrevista con la Dra. Marta Ferrer, directora de la Unidad de Educación Médica de la Universidad
La Dra. Marta Ferrer es la directora de la Unidad de Educación Médica (UEM), así como la profesora titular de alergología y directora del departamento de Alergología de la Clínica Universidad de Navarra. Presenta el programa de la UEM con las actividades para este año.
¿En qué consiste la Unidad de Educación médica?
La Unidad de Educación Médica de la Facultad de Medicina existe para formar a los profesores, sobre todo de Medicina pero también profesionales de las ciencias de la salud, en técnicas de enseñanza para que hagan sus clases más dinámicas y los alumnos mejoren su aprendizaje. De una forma intuitiva, tanto los profesores como los médicos estamos todo el día enseñando, pero no hemos adquirido un aprendizaje sobre cómo hacerlo. En ese sentido, los cursos que organizamos muestran a los profesores las distintas facetas en que consiste su tarea docente.
¿Cuáles son los temas que se van a tratar este año?
En concreto nos vamos a centrar en dos campos: el primero en cómo impartir mejor las clases en grandes grupos y el segundo en cómo mejorar la enseñanza en consulta hospitalaria. En cuanto a las clases, por una parte hemos organizado un curso para estimular el hacerlas más dinámicas y que atraigan la atención del alumno. Cambiar ese paradigma de que el alumno aprende únicamente cuando estudia y conseguir que aprenda en la clase magistral. La enseñanza se centra excesivamente en que el profesor imparta su asignatura, olvidando de que de lo que se trata es que sea una verdadera experiencia de aprendizaje para el alumno. Viene a impartirlo un experto reconocido internacionalmente, Manuel Joao Costa, que está especializado en cómo empatizar con los alumnos en clases de grandes grupos.
En esta misma línea, en la universidad tenemos unas herramientas online muy buenas para estimular el aprendizaje previo y poner en marcha clases denominadas ‘flipped class’, donde el alumno acude a clase habiendo realizado previamente diversas actividades, de forma que antes de ir a clase ya ha adquirido un aprendizaje previo y acude al aula para completar su conocimiento. De esta forma se estimula la atención y se aprovecha la clase mucho más. Hemos impartido en noviembre un curso sobre cómo diseñar y validar un buen examen tipo test. La forma de mejorar la enseñanza en consulta lo impartimos mediante un MOOC sobre enseñanza hospitalaria que tiene una gran acogida.
¿Qué modelo educativo pretende impulsar con esta unidad?
Queremos impulsar un modelo centrado en el que aprende, que sabe reconocer y satisfacer los distintos estilos de aprendizaje, participativo, que estimule el pensamiento creativo y la formación en valores profesionales. En este sentido las sesiones que organizamos son prácticas y los profesores traen proyectos que quieren poner en marcha, clases, seminarios, etc. En ellas les ayudamos a aplicar en su clase algunas de las herramientas y metodologías docentes (como la plataforma docente Blackboard).
Es importante tener en cuenta que las nuevas generaciones que están accediendo a la universidad han aprendido desde muy pequeños con este tipo de dinámicas educativas. Pienso que, en esto, la enseñanza infantil en técnicas pedagógicas está mucho más adelantada que la universitaria. Por otra parte, nuestros estudiantes tienen un programa internacional muy potente y van a universidades en el extranjero donde estas metodologías se emplean de modo habitual. Además, nuestros alumnos han crecido con juegos, redes sociales y la imagen en la comunicación, que les ha configurado otra forma de aprender. Lo que hacemos es buscar profesores entusiastas que quieran aprenderlo y poco a poco, mediante contagio, vayan utilizándolo en grupos crecientes de alumnos. El mejor modelo educativo desde nuestro punto de vista es el que llaman los expertos ‘embedded’ una mezcla con técnicas tradicionales y metodologías más innovadoras. De hecho, el programa de medicina ya es así, hay simulación, enseñanza basada en problemas, resolución de casos, con mucho peso práctico. Se trata de mezclar cada vez más todos estos ingredientes y sacar lo mejor de cada uno. Esto tiene una ventaja y es que hay profesores que son muy buenos y disfrutan dando una clase magistral pero otros, en cambio, son brillantes en pequeños grupos. Cada profesor debe dar clase de la forma en que se sienta más cómodo.
Y para eso insistimos en que hay diversos estilos de aprendizaje, tenemos que saber llegar a cada alumno según su estilo. En este sentido, falsamente se pueden etiquetar a un alumno como mal estudiante, y en el fondo es que no hemos sabido llegar a su modo de aprender.
¿Qué otras áreas tienen estos cursos?
Una parte muy importante de nuestra tarea es enseñar profesionalismo, es decir, formar en valores profesionales que en el caso de un médico son muy amplios. Se ha puesto en marcha una asignatura Identidad profesional, que este año se centra en los valores de compasión y trabajo bien hecho.
¿Qué retos presenta la enseñanza actualmente para impartir estos talleres?
Por un lado, la falta de conocimiento que existe en torno a otras técnicas de aprendizaje. A eso se suma la resistencia de todos a cualquier tipo de cambio, es decir, salir de lo que denominamos nuestra zona de confort. Además, otra de las dificultades son los propios alumnos, que no quieren sacrificar su nota ante la inseguridad de hacer cosas distintas durante las clases. Hay que tener en cuenta que en el fondo la enseñanza tradicional es muy pasiva y todas estas técnicas exigen un esfuerzo tanto al profesor como al alumno. Por otro lado, el examen MIR que es tipo test nos condiciona bastante, pero va encaminándose totalmente hacia lo que estamos haciendo porque de hecho cuenta cada vez más con más imágenes, vídeos y casos clínicos. Esto es lo que justamente estamos enseñando y los resultados son muy buenos. El nuevo plan de estudios del Grado en Medicina de la Universidad de Navarra se basa mucho en la simulación, en los problemas de casos concretos, con mucho peso práctico.
¿Qué acogida ha tenido esta iniciativa?
La acogida ha sido muy positiva en ediciones anteriores, de hecho, ha sido óptima. La capacidad de convocatoria es siempre máxima y cubrimos todas las plazas. El feedback de los profesores es excelente y, desde que hemos empezado, todos los cursos se llenan de profesores entusiastas que aportan muchas sugerencias. En resumen, todas estas actividades van encaminadas a que los profesores enseñen mejor, disfruten más enseñando y sobre todo que los alumnos aprendan.