Alumnos de Primaria del colegio San Cernin participan en una actividad de promoción de la salud en la Universidad
Alumnas de la Facultad de Enfermería han organizado varios talleres dentro del Aula Saludable
FOTO: Manuel Castells
108 alumnos de 1º de Primaria del Colegio San Cernin han participado en una actividad de promoción de la salud impulsada por el Aula Saludable de la Facultad de Enfermería de la Universidad de Navarra.
En pequeños grupos, los niños de 5 y 6 años han intervenido en tres talleres diferentes. A través de juegos, canciones, prácticas manipulativas y dinámicas adaptadas a su edad, han aprendido a realizar una reanimación cardiopulmonar, a identificar el contenido de un botiquín y a curar una herida, ayudados de simulación de baja fidelidad con tasktrainer de brazos y piernas. Además, se ha enseñado a los pequeños a identificar los principales huesos y órganos del cuerpo humano y a clasificar los alimentos en la pirámide alimenticia.
La actividad ha estado liderada por dos alumnas internas, Marta Belmonte y Lucía Mazzuchelli, y una alumna que cursa el Diploma en Liderazgo, Investigación y Docencia (LID), Irati Valencia; todas del departamento de Enfermería Comunitaria y Materno-infantil. Estas tres alumnas han recibido formación previa, como agentes de promoción de salud y, a su vez, mediante la formación por pares han instruido a otras 16 estudiantes de 3º, quienes han impartido los diferentes talleres.
“La idea de esta actividad era generar una cultura de salud en los niños, pero también desarrollar habilidades de liderazgo en nuestras alumnas de Enfermería”, explica la profesora Marta Vidaurreta, una de las responsables del proyecto.
“Formamos a nuestras compañeras a través de seminarios para que aprendieran la información que queríamos transmitir y les enseñamos cómo adaptarla a los niños a través del juego”, cuenta Marta Belmonte, una de las alumnas internas que lideró el proyecto. “Nos hemos basado en actividades sencillas, que llamasen la atención a los niños; muy interactivas para fomentar su aprendizaje”, explica su compañera Irati Valencia. “Ha sido una experiencia muy gratificante. A mí, personalmente, me ha ayudado a aprender cómo dirigirme a los niños y a darme cuenta de que su aprendizaje está muy basado en la observación”, concluye.
Precisamente, el adquirir las habilidades necesarias para comunicar eficazmente con niños tan pequeños era uno de los objetivos de la actividad. “Mediante este proyecto, también buscábamos que las estudiantes de Enfermería, al planificar las actividades y desarrollar los talleres con los niños, comprendiesen los rasgos característicos de desarrollo en la etapa escolar”, explica la profesora Maider Belintxon, también responsable del proyecto.
“Nos preocupaba la coordinación de todo el equipo, que se ajustaran a los tiempos y a su vez poder transmitir a los niños la información de manera didáctica”, reconoce Lucía Mazzuchelli, otra de las alumnas internas que han liderado la actividad. “Hemos aprendido a trabajar en equipo, a gestionar el estrés en momentos de dificultad. Ha sido una experiencia muy rica”, concluye.