Eduardo Martínez Abascal, Profesor del IESE, Universidad de Navarra
Desconfianza en el Gobierno
Desde la cumbre de Davos (28 enero), venimos oyendo comentarios negativos sobre la situación financiera del sector público español. Los inversores internacionales, que son los que le prestan dinero al Gobierno español, han manifestado sus dudas.
¿Hay datos que justifiquen esta preocupación? Pues veamos. Tenemos una deuda pública equivalente al 55% del PIB. Es el mejor dato de todos los países desarrollados de nuestro entorno, que rondan el 70%. Ahora bien, el último año hemos sido el país que más ha aumentado su deuda pública. Pero creo que la deuda no es el problema.
El problema es el déficit, que alcanza casi el 12% del PIB (unos 120 millardos [miles de millones] de euros). Es un déficit muy alto. Claro, que Reino Unido tiene un déficit superior (14%) y no se habla tanto de él ni de su Gobierno.
La situación de España no es buena. En diciembre tampoco lo era. En enero no han surgido más noticias negativas. Entonces, ¿por qué esa preocupación internacional sobre España? Los datos, aun siendo muy malos, no explican ese súbito aumento.
Mi impresión es que las dudas vienen provocadas por la pobre impresión que el Gobierno ha causado en los foros internacionales, empezando por Davos. Allí se reúnen todos los jefes de Estado y de Gobierno y todos los banqueros y empresarios. Se reúnen los que nos prestan dinero y los que invertirán en España. Si la imagen que ofrece el representante español no es buena, es lógico que los inversores desconfíen, o al menos que su nivel de confianza baje.
Si a usted le deben un dinero, se reúne con el deudor y las explicaciones que recibe son vagas y genéricas, sacará la conclusión de que el deudor no es muy de fiar, o al menos albergará dudas. Eso es lo que ha pasado (en mi opinión).
¿Se puede solucionar el déficit? Respuesta: sí. Mi colega del IESE y ahora secretario de Estado de Economía, el profesor Campa, ha dicho que el déficit se solucionará como se hizo con Solbes y Rato. Efectivamente, el déficit público bajó de un 6,5% en el 95 a un 3,4% en el 97.
Pero, un pequeño detalle: entre medias hubo un cambio de Gobierno, en marzo del 96. Fue el Gobierno de Aznar (con Rato de ministro) el que disminuyó el déficit. Solbes no lo pudo conseguir con el Gobierno socialista de Felipe González. Es posible que ahora ocurra lo mismo, y por eso los mercados están nerviosos sobre el futuro de España y, más en concreto, sobre la capacidad de su Gobierno.