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Pablo Blanco, Profesor de Teología

¿Qué hace el Papa en un país así?

lun, 19 ene 2015 11:49:00 +0000 Publicado en La Razón
Tan sólo el 6,1% los 20 millones de habitantes del país son católicos, mientras que más de tres cuartas partes son budistas, 8,5% son musulmanes, y 7,9%, hindúes. ¿A qué va el Papa Francisco a un país así Un viejo misionero decía que «el pasado es Europa y América; el presente, África; y el futuro, Asia». Tal vez Bergoglio -un jesuita que
quiso ir de misionero al Japón quiera traerla al presente. Sobre todo, teniendo en cuenta que Sri Lanka es el país más religioso del mundo, pues el 99% de sus habitantes declaró en 2008 que la religión es importante en su vida diaria. Además, el contexto actual podría ser signifi cativo: mientras Occidente se debate entre un laicismo beligerante y un fundamentalismo de origen supuestamente religioso, en este país con la mayor densidad de población del mundo las religiones podrían convivir 
pacíficamente.

La paz es la principal tarea de cualquier credo. La historia de las religiones también ofrece interesantes luces. El 70% de sus habitantes son budistas de la escuela de Teravada, que fue introducida en el siglo II por el venerable Mahinda. El hinduismo se sitúa en el centro y este del país, y es profesado fundamentalmente por la etnia tamil. El islam fue traído por los árabes en el siglo VII, de los que se sienten sus descendientes. El cristianismo, sin embargo, no llegó a la isla de Ceilán -entonces así llamada-
hasta el siglo XVI, introducido por los colonos. De ellos, el 82% son católicos, mientras existen también anglicanos y protestantes. Hay también seguidores del Zoroastro, procedente de la India.

Lo que resulta realmente complicado en este país es encontrar un ateo o un agnóstico. Partiendo de esta condición de creyentes en alguna religión, el Papa Francisco apeló a la condición pacífica de todas ellas: «Todos deben ser libres para expresar sus puntos de vista. Tienen que estar preparados para aceptarse unos
a otros y aceptar las diferencias». El diálogo construye la paz. «Por el bien de la paz, nunca se debe permitir que las creencias religiosas sean utilizadas para justificar la violencia y la guerra», dijo en su discurso a los líderes de los distintos credos religiosos, tal vez dirigiendo su mirada también a otras regiones del planeta, tras ser recibido entre elefantes vistosamente ataviados. Quizás, estos enormes animales puedan ser un símbolo de la paz, como lo es para nosotros la paloma con el ramo de olivo.