La autorregulación, la habilidad de renuncia, la formación en el valor del compromiso social y el pensar en el beneficio de todos por encima del propio son algunas de las competencias personales que jóvenes y adolescentes deben adquirir para poder hacer frente a la pandemia de una manera solidaria y responsable.

El catedrático de Psicología Evolutiva y de la Educación de la Universidad de Navarra, Jesús de la Fuente, las expone en un artículo en forma de carta en la que unos padres dan las gracias a sus hijos por su comportamiento. 

Jesús de la Fuente entiende que el momento actual podría ser idóneo para analizar las competencias en comportamientos de salud del país. “La guerra contra el virus también se libra desde las competencias educativas personales que tenemos para enfrentarnos a esta situación”, expone el profesor.

Competencia personal para hacer frente a una pandemia

Queridos hijos míos:

Esta carta es de agradecimiento. Mamá y yo somos conscientes de las fiestas que os habéis perdido y las salidas con los amigos que han quedado truncadas por cuidarnos y evitar así que el Covid-19 entre en casa. Lo habéis hecho desde el mes de marzo hasta ahora…

Muchas gracias porque, a pesar de vuestra corta edad, sois personas inteligentes, con un conocimiento bien ordenado sobre la pandemia y el coronavirus, sus causas, sus procesos y sus consecuencias. Pero, sobre todo, por vuestros principios. Por esos principios de respeto y cuidado de vuestros mayores que asumís cada día, con vuestro comportamiento, con vuestras renuncias y sacrificios. Seréis personas que prefieran ciencia con conciencia. 

Muchas gracias porque, a pesar de las ebulliciones de la adolescencia y de la juventud, habéis desarrollado autorregulación, para renunciar aquellas situaciones que, son muy divertidas, a corto plazo para vosotros, pero muy peligrosas, a medio plazo, para nosotros. Habéis sabido tener habilidad de renuncia, tan importante para la vida cotidiana. Esto es, realmente, lo que nos diferencia de otros animales sin cortex prefrontal. Seréis personas que saben controlarse y renunciar a lo que no les ayuda a ser mejores personas o que perjudica a los demás.

Muchas gracias porque, a pesar de los valores imperantes del negacionismo irracional y la moda del postmodernismo, en donde la libertad individual está muy por encima de los intereses y del bien de la comunidad, habéis sido capaces de poneros en el lado correcto de la historia. Muchas personas están sufriendo y dando -literalmente- su vida por doblegar al virus. El valor del compromiso social, de pensar en el beneficio de todos los que son vulnerables y os rodean (especialmente de vuestros mayores) y no sólo en vuestro capricho, dice mucho de vosotros y de vuestra responsabilidad. Seréis personas con valores y fortalezas personales que os ayudarán mucho en el camino de la vida.

Si la evaluación de las competencias, tal y como figura en nuestro Sistema Educativo, debe ser aplicada y contextualizada, éste podría ser un buen momento para analizar las competencias en comportamientos de salud de un país -aunque esto no conste en el informe de la OCDE. La guerra contra el virus también se libra desde las competencias educativas personales que tenemos para enfrentarnos a esta situación. Y las mismas se demuestran, precisamente, cuando la tormenta arrecia en el mar, no con el mar en calma.

Muchas gracias. Estamos orgullosos de vosotros. Papá y mamá.