La medición de la longitud del cuello de útero puede identificar a mujeres con riesgo de parto prematuro
La medición de la longitud del cuello de útero puede identificar a mujeres con riesgo de parto prematuro
La Clínica Universidad de Navarra incorpora en el control habitual del embarazo la medición de este factor a mitad de gestación como prevención
El Departamento de Ginecología y Obstetricia de la Clínica Universidad de Navarra ha añadido al protocolo habitual para el control del embarazo la medición de la longitud del cuello de útero como factor identificativo del riesgo de parto prematuro. Dicho parámetro se controlará en todas las pacientes, presenten o no embarazo de alto riesgo. "Incorporamos la medición de la longitud cervical a raíz de la reciente publicación de un estudio internacional que revela que, en aquellas pacientes con un cérvix corto detectado a mitad de embarazo, el tratamiento mediante progesterona vaginal reduce significativamente las posibilidades de un parto pre-término", apunta el doctor Juan Luis Alcázar, especialista del Departamento de Ginecología de la Clínica. La medición cervical se realizará mediante ecografía en las gestantes que se encuentren entre las semanas 20 y 23 de embarazo.
La incorporación de este factor al control normal del embarazo supone un avance importante, "ya que la prematuridad del recién nacido sigue siendo una de las principales causas de morbi-mortalidad perinatal (complicaciones, secuelas o muerte del neonato), derivadas de su condición de prematuro", indica el especialista.
Conclusiones del estudio internacional
El trabajo internacional "Pregnant trial", liderado por el doctor Romero y en el que tiene su origen la aplicación de este control, es un estudio randomizado (aleatorio) en el que se comparó y evaluó mediante ecografía sistemática dos grupos de mujeres que presentaban acortamiento precoz del cérvix. A uno de los dos grupos de embarazadas se le trató con progesterona y al otro no.
Tras comparar los resultados, los investigadores concluyeron que la administración de progesterona en mujeres que a mitad de embarazo presentaban un cuello uterino corto, "reducía significativamente la probabilidad de tener un parto antes de la semana 35 de gestación y hay que tener en cuenta que la mayor seguridad de feto maduro ocurre por encima de las 37 semanas", apunta el doctor Alcázar. De este modo, el estudio reveló que mediante este método de control y tratamiento se consigue disminuir de forma importante la posibilidad de un parto prematuro en un porcentaje situado entre el 40 y el 50% de los casos.
Los especialistas consideran un cérvix corto cuando en la semana 20-23 se presenta por debajo de los 20 mm. Es en estos casos, en los que la administración de progesterona "aporta un beneficio real para la paciente", subraya el doctor Alcázar. Como se sabe, la progesterona es una hormona que se administra por vía vaginal cuyo efecto consigue evitar el acortamiento precoz del cuello uterino y su dilatación. "En definitiva, consigue impedir que la embarazada sufra contracciones que, en muchas ocasiones no nota, pero que consiguen acortar el cuello de útero sin que la gestante sea consciente", describe el especialista.
Las sólidas conclusiones aportadas por el estudio multicéntrico e internacional han sido determinantes para que el Departamento de Ginecología de la Clínica Universidad de Navarra haya decido incorporar la medición de la longitud del cuello de útero al protocolo de seguimiento habitual de los embarazos de todas las gestantes.