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Este año el XV Foro de Humanidades que organizan los alumnos de la Facultad de Filosofía y Letras, contó con un invitado especial: Javier Olivares, profesor de guion en la Complutense, que creció leyendo Shakespeare, estudió Historia, es crítico de cine y siempre ha escrito teatro. Con 37 años empezó en el mundo del guion profesional y junto con su hermano Pablo, reescribió el guion de "Isabel", una de las series que cuenta con más graduados en Historia del Arte. Aseguró que este tipo de productos "acercan el valor de las Humanidades a personas que quizá no tendrían acceso a esos conocimientos".

En su intervención, Javier Olivares arremetió contra los informativos que ofrecen la realidad "como espectáculo, no como contenido informativo. Esa evasión continua ha sido el reino de la risa fácil y ha hecho más daño que los reality. En la tibieza no hay creatividad", aseguró. El déficit cultural de nuestro país es poder contar la historia haciendo ficción, y le pareció "increíble que se haya tenido que esperar al año 2010 para que alguien hable de los Reyes Católicos en una serie de televisión". El guionista lo achacó a que hay "mucha vergüenza por contar la propia historia, porque a menudo hay más ideología que conocimiento". En el caso de "Isabel" estamos hablando de "una mujer que llega a reina en el siglo XV". Y en Twitter se encontró "desde afirmaciones de que fue una santa, a todo su contrario".

Olivares llegó a "Isabel" y la rehizo entera, ya que "el padre de Fernando el Católico se pasaba sus ratos de ocio tirando al arco. Y era ciego. Había personajes muertos que vivían; otros que no habían nacido y vivían…" Y con estos argumentos apeló a la necesidad de ser rigurosos en la documentación. "Lo más maravilloso de ser guionista es que te empapas de lo que llevas entre manos. Hay que estudiar. Estudiar siempre".

En las tres series de las que ha escrito el guion: "Isabel" (histórica); "Víctor Ros" (basada en el personaje de las novelas de Jerónimo Tristante) y "El Ministerio del tiempo" (fabulación de aventuras), todos los elementos históricos que aparecen son verdad. "Las tres tienen que ver con la historia, pero el concepto que les une es que hablamos de nosotros, de nuestra identidad nacional. Estamos saturados de series americanas".

"Los historiadores somos muy necesarios", concluyó. "Al final de este camino he conseguido que algunos chavales me digan que van a estudiar Historia. Y eso me enorgullece". Ante la intervención de un estudiante que le preguntó acerca de la relación entre el guionista y el productor, le aconsejó "que te dejen conservar tu alma y te dejen trabajar. Es imposible hacer algo nuevo, pero tienes la obligación de hacer algo diferente. En una partitura solo hay ocho notas; sin embargo, se siguen componiendo canciones".