Publicador de contenidos

Volver 2013_12_02_granrecogida

Voluntarios en la Gran Recogida

Alumnos y profesionales colaboraron donando alimentos, como voluntarios y difundiendo la campaña en las redes sociales

02/12/13 12:11
Descripcion de la imagen

Una vez más, Tantaka ha vuelto a apoyar este fin de semana una nueva convocatoria de la Gran Recogida promovida por el Banco de Alimentos de Navarra. Lo ha hecho a través de sus voluntarios, y en especial, mediante la difusión en redes sociales de las dos jornadas de solidaridad.

Desde Tantaka se animó a toda la comunidad universitaria a participar en la iniciativa donando algunos alimentos de primera necesidad en los supermercados y centros comerciales que han colaborado con la campaña; pero también difundiendo imágenes, historias o anécdotas en la red social Twitter bajo la etiqueta #GranRecogida, para así dar a conocer el trabajo que se lleva a cabo y el espíritu solidario de la comunidad navarra.

____________________________________________________________________________________________________

Solidaridad gota a gota

La #GranRecogida contada por los voluntarios

____________________________________________________________________________________________________

Mi experiencia en la #GranRecogida



Lucía María Martínez Alcalde
6º Filosofía + Periodismo

El curso pasado fue la primera vez que colaboré con la #GranRecogida, en el equipo de tuiteros voluntarios que se formó desde Tantaka para dar cobertura al evento en las redes sociales. Me conmovió mucho por una parte la labor de los voluntarios y por otra, la solidaridad de la gente: casi todo el mundo daba algo, aunque fuera poco.

Esto es algo que he podido comprobar de primera mano en esta III Gran Recogida en la que he participado como voluntaria para el Banco de Alimentos y también como tuitera. La solidaridad de la gente era constante. Me impresionó mucho una mujer peruana: cuando entró al supermercado no quiso saber mucho de lo que le contábamos, creo que se pensó que estábamos intentando venderle algo, porque luego, cuando ya había pagado su compra y nos vio con las cajas, se nos acercó y nos dijo: "Ah, esto es para colaborar dando alimentos, ¿no? Pues tengo varias cosas en casa que ahora os voy a bajar". Y a los pocos minutos apareció con una bolsa llena de arroz y pasta y nos contó que ella recibía alimentos de su parroquia también, pero que esos paquetes de comida podía dárnoslos para gente que lo necesitara más. También nos preguntó si cogíamos "potitos". Y a la hora siguiente apareció con toda una caja de comida para los más pequeños.

Te calan pequeños detalles de gente que dona con el corazón y con la cabeza: una señora trae turrones "porque la gente con menos recursos también querrá tomar turrón en Navidad, ¿no?"; otra mujer nos da un envase enorme de leche en polvo para bebés; una chica nos pregunta qué alimentos necesitamos más, le decimos que sobre todo tenemos pasta y arroz y harían falta más conservas, y aparece a los pocos minutos con muchas latas de bonito y sardinas; un hombre nos dona dos paquetes de spaghettis sin gluten pensando en las personas celiacas…

Cientos de pequeñas (y no tan pequeñas) historias que dan mucha esperanza y que ayudarán no sólo a las 39.000 personas que se benefician del Banco de Alimentos de Navarra, sino a todos los que hemos podido vivirlas de cerca.

 

Raquel Rodríguez
PIE del servicio de Comunicación Externa


Es impresionante ver la cantidad  de gente a la que mueve una campaña como "La Gran Recogida"; gente que va al súper a comprar un paquete de café para su casa y sale con tres bolsas de comida llenas para el contenedor del Banco de Alimentos, gente que tiene poco para su familia pero gasta parte de ese dinero en compartirlo con los que tienen aún menos.

Cuando estás ahí como voluntario esperando a la gente que entra para explicarle en qué consiste la campaña, ves que la gran mayoría sólo tiene que mirar el contenedor para saber de qué se trata y muchos directamente alargan la  mano para coger una bolsa aunque no hayas dicho ni una palabra.

En el poco rato que estuve como voluntaria (menos de dos horas) se llenó medio contenedor y hubo gente que vino exclusivamente para comprar para la recogida. Hubo un señor que nos dijo que le encantaba que algo así existiera y que había venido de su pueblo para poder participar porque allí no hacían; y una señora que al ofrecerle una bolsa me pidió tres porque todo no le iba a caber en una. Y muchas más personas que con poco o con mucho, aportaron su granito de arena para conseguir que gente que no tiene nada pueda vivir algo mejor.

Cuando terminé mi turno me dirigí a otro supermercado de Barañáin para ver cómo iba ahí la recogida y estuve hablando con uno de los voluntarios del Banco de Alimentos, un señor jubilado que estaba encantado de poder ayudar a los demás. Me contó que el año pasado estuvo enn el mismo sitio y en el mismo horario y que a esas alturas de mañana, llevaban más o menos la mitad de lo que habían recogido este año y que parecía que esta vez la gente estaba más concienciada.

Así que me quedo con la solidaridad de la gente que se mueve por otros sin importar que sean desconocidos, sabiendo que con poco que hagan pueden conseguir que la vida de alguien sea un poco mejor.

 

BUSCADOR NOTICIAS

BUSCADOR NOTICIAS

Desde

Hasta