Los actos conmemorativos del III Centenario de la canonización de santa Teresa en Navarra (1922) no tuvieron en Navarra, por obvios motivos, tanto eco como los del copatrono san Francisco Javier. No obstante, la importante presencia del Carmelo Teresiano a lo largo de la Comunidad Foral, hizo que se celebrase con mayor o menor pompa en Lesaca, Villafranca, Pamplona y Corella. De la conmemoración pamplonesa, en base a una fotografía conservada en el Archivo Municipal, dio cuenta Ana Hueso. En aquella ocasión se decoró la fachada de los Descalzos con un interesante lienzo de la santa con sus fundaciones que conservan las Carmelitas Descalzas de San José de la capital navarra.

No fue la única celebración en torno a la santa en Pamplona. En el colegio de las Teresianas se organizó una gran velada literario-musical que se representó en el salón de actos del Orfeón Pamplonés el día 14 de mayo. De sus protagonistas, con nombres y apellidos, dejó una reseña con su fotografía la revista La Avalancha (24-X-1922).

_{Velada literario musical organizada por las Teresianas de Pamplona. Foto La Avalancha, 24-X-1922}

En esta ocasión recordaremos lo referente a Corella, a la luz de un testimonio fotográfico y la crónica conservada por las Carmelitas Descalzas de Araceli.

Una fotografía en Corella de Marcelino García de 1922

En 1922 se celebró por todo lo alto en Corella un doble acontecimiento: el segundo centenario de la fundación de las Carmelitas de Araceli y el tercer centenario de la canonización de santa Teresa. De la procesión celebrada tomó sendas fotografías el fotógrafo y pintor Marcelino García. Un par de expedientes redactados por una religiosa del mencionado convento y Nolasco Viscasillas dan cuenta de las efemérides, con cuyo motivo hubo grandes funciones religiosas, que culminaron con una magna procesión, a las cuatro de la tarde del día 3 de septiembre de 1922, con las imágenes de santa Teresa, la Virgen de Araceli y el Niño Jesús de Praga de los padres Carmelitas por las calles de Corella, haciendo estación en las Benedictinas y en la parroquial de San Miguel. Con la presidencia civil del Ayuntamiento de la ciudad y la banda de música y el acompañamiento de la Banda de Música, recorrió las calles San Roque, Mayor, Merced para entrar en la Benedictinas, Placeta, Plaza de la Verdura, Plaza de los Fueros, Crucero, Carmen y Santa Teresa. El acto duró tres horas, regresando al anochecer a Araceli.  No faltó la pólvora, los volteos de campanas, ni el florido sermón a cargo del prior de los Carmelitas, el padre Anastasio. La capilla de música fue reforzada con elementos foráneos de Logroño y Villafranca. La citada crónica relata la auténtica locura colectiva, los gritos de Vivas, los sones de la Marcha Real en los órganos de Araceli y San Benito y de la Banda de Música.

_{Procesión en Corella para celebrar el III centenario de la canonización de la santa y II centenario de la llegadas de las Carmelitas Descalzas a la ciudad. Foto Marcelino García.  Carmelitas Descalzas de Araceli}

La instantánea está tomada en la calle Merced, con vista hacia la Iglesia de la Merced, que es el edificio alto del fondo, ya desaparecido, en un paraje de la ciudad en la actualidad muy transformado. Protagoniza la escena el paso de la santa, rodeado de muchas personas que portan faroles, velas y lucen el escapulario del Carmen.

El autor de la foto es Marcelino García Martínez “el tío Catoles” (Grávalos, 1877- Corella, 1950), que tenía un estudio fotográfico en Corella. Los restos de un sello circular en la parte inferior derecha no deja lugar a duda alguna. García era también  pintor, cuya obra, tanto religiosa como retratos, se conserva en Corella, realizando en 1922 las pinturas del presbiterio del convento de Carmelitas Descalzos de dicha ciudad y en Fitero sendos cuadros de la capilla de la Virgen de la Barda. Las primeras noticias de García como fotógrafo las tenemos en los programas de fiestas de dicha población de 1903 y 1904, donde insertó sendos anuncios de su estudio. Nuevamente, lo volvemos a ver en el programa de 1927, aunque no como anunciante, sino como autor de las fotografías del mismo. Dicho fotógrafo cedió su archivo, compuesto por negativos y positivos, para su custodia a Juan Escudero, quien a su vez lo donó al ayuntamiento de Corella, en cuyo archivo se custodia hoy en día. Desde Araceli recibió varios encargos, en 1925 para fotografiar a santa Teresa, un poco más tarde al Niño Jesús vestido de carmelita y con anterioridad lo hizo con la Virgen de Araceli.

PARA SABER MÁS

FERNÁNDEZ GRACIA, R., Tras las celosías. Patrimonio material e inmaterial en las clausuras de Navarra, Pamplona, Universidad de Navarra - Fundación Fuentes Dutor, 2018
HUESO, A., “Celebración del III Centenario de la canonización de santa Teresa de Jesús (Pamplona, 1922), https://www.unav.edu/web/catedra-patrimonio/aula-abierta/pieza-del-mes/2014/octubre, consulta 23 de septiembre de 2022
La Avalancha, núm. 661, 24 de octubre de 1922