Víctor Pou, Profesor del IESE y Universidad de Navarra
UE: la última oportunidad
La UE vive los momentos más difíciles de su historia. El exministro alemán de asuntos exteriores, Joschka Fischer, escribió: "En Europa todos ya saben que o bien la crisis actual destruye la UE o bien produce su unión política". Los defectos de la arquitectura fundacional de la zona euro -nacida sin unión política ni unión fiscalfueron abordados primeramente con improvisaciones. A partir del verano de 2012, el Consejo Europeo decidió que el euro debía salvarse a toda costa. Luego llegaron las famosas declaraciones del presidente del BCE, Mario Draghi, según las que se haría todo lo necesario para garantizar la continuidad de la moneda única. Hoy se avanza con paso decidido hacia la unión bancaria. A partir de las elecciones alemanas de septiembre, veremos nuevos avances hacia la unión fiscal y la mutualización parcial de la deuda acumulada. La zona euro podrá cantar victoria por haber superado sus problemas congénitos, pero volverá a plantearse con más fuerza que nunca la gran cuestión: ¿qué Europa concreta queremos para hacer frente a los retos del siglo XXI?
El proceso de integración europea nace como respuesta a las necesidades de paz después de la Segunda Guerra Mundial, pero hoy avanzamos juntos porque ya sabemos que ninguno de los estados europeos es capaz por separado de proyectarse con éxito en el mundo de la globalización. Europa, a pesar de sus 500 millones de habitantes y de contar con el mayor mercado interior del mundo, irá a la decadencia si no avanza hacia la unión política. El presidente del Parlamento Europeo, Martin Schulz, ha dado en el clavo al publicar un libro sobre el estado actual de la UE titulado El gigante encadenado. Argumenta que de joven había soñado con unos Estados Unidos de Europa, pero con los años ha podido constatar la fuerza de las identidades nacionales. De aquí que apueste por la configuración de una Europa como federación de estados. Esto significa un reforzamiento de los poderes de las instituciones europeas comunitarias -Comisión, Parlamento y Tribunal de Justiciay la conversión del Consejo Europeo en una segunda cámara en la que estarían representados los intereses de los estados. Schulz dice que estamos ante "la última oportunidad para Europa" y que el coste de perderla sería nuestra irrelevancia en el escenario internacional.