En el corazón del barrio de Vallecas se encuentra el colegio Tajamar. Surgió en 1958 por un deseo expreso del fundador del Opus Dei. Desde entonces, mucho más que un centro educativo, este colegio ha aportado soluciones a carencias de todo tipo, en un barrio donde la pobreza abundaba pero escasas oportunidades de salir adelante. Tajamar surgió como un espacio para ofrecer educación y valores cristianos. Su historia y la del barrio fueron de la mano gracias a quienes vieron en la educación el camino hacia un futuro mejor. Por eso, el historiador Julio Montero afirma en un artículo publicado en la revista Studia et Documenta, que «Tajamar no es una idea diseñada en un laboratorio que se puso en práctica como experimento de ingeniería social por parte de un grupo de personas bienintencionadas». 

Entrevistado por el Centro de Estudios Josemaría Escrivá, Julio Montero explica la investigación en curso sobre el Colegio Tajamar. Montero es catedrático de la Universidad Complutense y la Universidad Internacional de la Rioja. 

¿Cuál fue la motivación inicial para emprender una investigación histórica sobre el colegio Tajamar?

El proyecto educativo Tajamar fue puesto en marcha en los años 1957-1958 por un grupo de personas del Opus Dei con el propósito de proporcionar educación de calidad, tanto académica como profesional, en respuesta a las necesidades de la población del barrio de Vallecas, en Madrid. 

En aquel momento, España experimentaba una migración masiva de áreas rurales a las ciudades, lo que generaba una creciente demanda de servicios educativos. Tajamar surgió como una respuesta concreta a esta necesidad en un contexto donde el analfabetismo era aún un problema significativo, especialmente en áreas urbanas de inmigración reciente. Tajamar representaba una oportunidad para brindar educación a estudiantes y sus familias. 

Por tanto, investigar los orígenes y la evolución de Tajamar nos permite entender no solo la historia del colegio en sí, sino también el panorama educativo y social de la época en España.

¿En qué consiste el proyecto de contar su historia? ¿Cuál es el objetivo principal?

Nuestro objetivo es resaltar la singularidad y relevancia de esta iniciativa educativa. La proximidad del centenario del Opus Dei nos brinda una oportunidad de dar a conocer la historia del colegio, que ha sido una de las primeras obra social corporativa de carácter educativo que pusieron en marcha algunos miembros de la Obra.  

En el equipo nos interesa ofrecer un relato histórico bien documentado que destaque las características innovadoras y el impacto significativo que Tajamar ha tenido en la comunidad de Vallecas. Este relato no busca ser una narración convencional sobre un centro educativo, sino que dé cuenta de cómo Tajamar ha influido en la vida de sus estudiantes, en el barrio y en la educación en general.

Sois un equipo de investigadores, ¿cómo ha sido el proceso de organización y gestión del equipo a lo largo del proyecto?

El equipo ha organizado diversas tareas. En primer lugar, hay un grupo dedicado a organizar el archivo de la institución. Otro grupo se ha sumergido en el estudio del contexto legislativo, socioeconómico, educativo y cultural en el que se desarrolló Tajamar, lo que proporcionará un marco sólido para entender su evolución a lo largo del tiempo y sus aportes en la historia de la educación.

Por otro lado, tenemos un plan de entrevistas a unas 100 personas relacionadas con la institución, desde antiguos directivos y profesores hasta padres de antiguos alumnos y los propios exalumnos. Hemos procurado escoger entrevistados de diferentes edades y períodos históricos para garantizar una perspectiva integral. Además, pronto lanzaremos un cuestionario online dirigido a antiguos alumnos con la esperanza de obtener información valiosa. También estamos reuniendo información sobre las trayectorias profesionales de los exalumnos, lo que proporcionará una visión completa del impacto de la educación de Tajamar en sus vidas.

Es decir, estamos actualmente en la fase de acopio de una gran cantidad de información que nos permitirá abordar un proyecto histórico que esperamos pueda ser una historia social completa de la institución.

¿Qué desafíos y retos habéis encontrado durante el proceso de investigación?

El principal desafío ha sido la consolidación del equipo de investigación. Reunir a colaboradores dispuestos a dedicar tiempo y esfuerzo de manera consistente ha sido una tarea clave. El equipo principal, compuesto por dos antiguos directivos de Tajamar, dos antiguos alumnos y un colaborador externo experto en educación, se reúne mensualmente para establecer metas y revisar el progreso.

Actualmente ya somos casi 20 personas involucradas en el proyecto. Cada una colabora de una u otra manera. La clave será continuar manteniendo una comunicación clara y efectiva entre todos para garantizar que el proyecto avance.

¿Para cuándo queréis tener lista la publicación?

Se ha fijado como meta publicar el libro el 2 de octubre de 1928, centenario de la fundación del Opus Dei. Para ello estamos trabajando para tener listo el texto hacia finales de 2027. Después de eso, vendrá la etapa de edición y producción del libro.