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Álvaro del Portillo será beatificado en Madrid el próximo 27 de septiembre
Fue el primer sucesor de San Josemaría y Gran Canciller de la Universidad (1975-1994)
Mons. Álvaro del Portillo, Gran Canciller de la Universidad entre 1975 y 1994, será beatificado en Madrid, su ciudad natal, el próximo 27 de septiembre. Así lo ha anunciado la Santa Sede, después de que el pasado 5 de julio, el Papa Francisco aprobase el milagro atribuido a D. Álvaro. La ceremonia de beatificación estará presidida por el Prefecto de la Congregación de las Causas de los Santos, el Cardenal Amato. Al día siguiente, Mons. Javier Echevarría, Prelado del Opus Dei y Gran Canciller de la Universidad, celebrará una Misa de acción de gracias.
"En este momento de profunda alegría –ha afirmado Mons. Javier Echevarría– deseo agradecer al Papa Francisco la beatificación de este obispo que tanto amó y sirvió a la Iglesia. Desde ahora encomendamos al futuro beato las intenciones del Santo Padre: la renovación apostólica y el servicio a Dios de todos los cristianos, la promoción y ayuda de los más necesitados, el próximo Sínodo sobre la familia, la santidad de los sacerdotes".
Mons. Álvaro del Portillo y la Universidad de NavarraDon Álvaro impulsó de primera mano la puesta en marcha del Centro de Investigación Médica Aplicada (CIMA), y lo que hoy es el Instituto Cultura y Sociedad (ICS). La Facultad de Teología debe también su crecimiento al futuro beato.
Breve biografía de Mons. Álvaro del PortilloNació en Madrid el 11 de marzo de 1914.
En 1935 se incorporó al Opus Dei. Muy pronto se convirtió en la ayuda más firme del fundador, San Josemaría Escrivá, permaneciendo a su lado durante casi cuarenta años, como su colaborador más próximo.
Era doctor Ingeniero de Caminos, doctor en Filosofía y Letras (Historia) y doctor en Derecho Canónico.
El 25 de junio de 1944 fue ordenado sacerdote. Desde entonces se dedicó enteramente al ministerio pastoral, en servicio de los miembros del Opus Dei y de todas las almas.
En 1946 fijó su residencia en Roma, junto a San Josemaría. Su servicio infatigable a la Iglesia se manifestó, además, en la dedicación a los encargos que le confirió la Santa Sede como consultor de varios Dicasterios de la Curia Romana, como la Congregación para la Doctrina de la Fe, la Congregación para el Clero, la Congregación para las Causas de los Santos y el Pontificio Consejo para las Comunicaciones Sociales. Trabajó en el Concilio Vaticano II.
En 1975 fue elegido primer sucesor de San Josemaría al frente del Opus Dei.
Fue Gran Canciller de la Universidad de Navarra desde esa fecha hasta el día de su fallecimiento en Roma, el 23 de marzo de 1994.