2015_11_02_ARQ_conferencia_fredy_massad
"La crítica debe provocar un contexto donde el pensamiento y el diálogo ayuden a generar la explicación de las cosas"
Fredy Massad impartió una sesión en la Escuela de Arquitectura en la que habló sobre su manera de entender la arquitectura y la crítica
Bajo el título "Iconos y leyendas. La construcción de un mito", Fredy Massad, arquitecto, crítico, bloguero- "La viga en el ojo" de ABC, sostuvo que la misión de la crítica debe ser poner en crisis las cosas, no dar soluciones. Según el autor del libro, "La viga en el ojo. Escritos a tiempo", "la crítica se ha transformado, vivimos en la cultura de la imagen, en una sociedad donde la construcción del mito es más importante que la propia realidad". "La arquitectura se ha convertido en un producto de consumo, de prensa "rosa", donde han aparecido algunos "arquitectos estrella" que, al ser encumbrados por la crítica, han conseguido restar poder a la Arquitectura en mayúsculas". Según Massad, "el crítico se ha convertido en un creador de estrellas, prescriptor, que decide y encumbra", y "la arquitectura con esa prepotencia, no deja espacio para la crítica, para la discusión. Nuestro tiempo está marcado por los star architectures, que hacen que exista una carrera en gran parte de la profesión por entrar en ese olimpo de los señalados por la crítica".
Según el arquitecto y crítico, "la arquitectura pensada desde lo digital, en paralelo al mundo, carece de sentido, y obedece muchas veces a caprichos, cuestiones morfológicas, que requieren grandes inversiones. La arquitectura es mucho más que un mundo de opulencia, de juegos, de eslóganes, de modas". "Ya no hay ideas, hay rostros, hay iconos, no importa tanto la arquitectura como construir un relato, contar una historia, un relato vital, propio de la prensa rosa. Además, en ocasiones, existe una brecha importante entre la imagen que algunos arquitectos quieren proyectar, y su verdadero trabajo".
"El resultado de todo esto es una paraarquitectura, la simulación de algo que está fuera de la arquitectura, donde todo se desvirtualiza. Un claro signo de este cambio está en el momento en el que las revistas de arquitectura dejan de mostrar en sus portadas las obras de los arquitectos, para empezar a enseñar sus rostros como iconos de la marca".
"La crítica que yo defiendo y reivindico es aquella que provoca un contexto donde el pensamiento y el diálogo ayudan a generar la explicación de las cosas. La crítica debe intervenir en el proyecto; no cuando éste ya esté acabado, sino que debe formar parte del proceso".