Resumen:
El autor pone de relieve la capacidad que tienen los textos litúrgicos de abrir horizontes amplios al misterio de la oración cristiana forjando un estilo de plegaria teologal y vital. Reflexiona sobre una colecta de Cuaresma del Misal Romano, ausente en el Misal de Pío V, y que hunde sus raíces en la mejor tradición de la lex orandi romana. El texto presenta un acento sumamente teocéntrico y contiene una expresión ¿«in oratione tua semper efficiamur concordes»¿ cuya traducción implica matices diversos.
Su análisis plantea algunas posibilidades que iluminan su profunda comprensión teológica.