La iniciativa Generación Clima COP27 seleccionó la propuesta en la que trabajó Pablo Sánchez-Bayo, estudiante del Doble Máster Universitario en Arquitectura + Diseño y Gestión Ambiental de Edificios (MUA + MDGAE) de la Universidad, para representar a España en la COP27 celebrada en Egipto. Pero Pablo no trabajó solo, sino que lo hizo en eqipo junto con otros tres universitarios de diferentes centros educativos (María Sánchez-Bayo, Ismail Sadeq y Ana Belén Torrejón) y una profesora de la UPM (Julia Urquijo Reguera).

El proyecto se llama  ‘Mapeo participativo del riesgo de inundaciones para favorecer la resiliencia urbana y la reducción de riesgo en Makeni, Sierra Leona’. La posibilidad de participar en la COP27 brindó a este equipo una gran oportunidad para compartir su proyecto con otros jóvenes y profesionales comprometidos en la lucha contra el cambio climático al más alto nivel.

Pablo Sánchez-Bayo nos cuenta cómo vivió la experiencia y hace una reflexión a partir de todo lo aprendido:

“Llegamos el lunes de madrugada y a partir de ahí fue un no parar. En la COP prácticamente no hubo tiempo para el descanso: días de reuniones, charlas, conferencias, aprender cómo funciona el sistema de negociación multilateral, hablar con profesionales de todos los campos (meteorólogos, economistas, políticos, divulgadores…) y conocer su opinión, comer rápido, ir corriendo de un lado para otro…

De estos días frenéticos hemos aprendido mucho, pero me gustaría resaltar un par de cosas. En primer lugar, esta cumbre es necesaria. A pesar de las incongruencias del evento en sí mismo (como la huella de carbono que se ha generado en únicamente dos semanas), a pesar de los escasos avances aparentes que suele haber (llevamos ya 27 cumbres y aún no se ha restringido el uso de algunos combustibles fósiles), a pesar del urbanismo insostenible de la ciudad en la que se celebra, a pesar de que haya más lobistas del sector del combustible fósil que países representados, a pesar de todo, es necesaria. Es necesario enfrentar la emergencia climática de frente, dejar de posponer reuniones y de evadir e-mails. Es necesario aportar soluciones y aportarlas ya.

En segundo lugar, ¿cuál es el papel de la juventud en un evento como este? Esta ha sido la pregunta que nos hemos hecho durante toda la conferencia. La respuesta ahora es clara: la población joven es la que más va a sufrir los efectos del cambio climático a nivel global y la que más tiene que perder. Nuestro futuro está en juego, nuestro estilo de vida está en juego y no vale con quedarse parados. La juventud tiene mucho que decir y muchas soluciones que aportar, debemos ser la palanca del cambio.

La solución no está únicamente en estas dos semanas que ha durado la conferencia, el trabajo duro empieza ahora. A nivel personal, cada uno de nosotros puede generar un gran impacto: en las cosas que compramos, en cómo nos movemos, en lo que comemos… En definitiva, en las cosas del día a día. Si la sociedad cambia, las empresas más contaminantes cambiarán para que su negocio siga funcionando y los políticos que toman las decisiones cambiarán para seguir teniendo votantes.

Como conclusión a esta experiencia me quedo con que, aunque la situación parezca difícil y aunque aparentemente no se hacen los avances suficientes para la emergencia en la que nos encontramos, cada uno de nosotros tiene la posibilidad de ser parte de la solución hacia el futuro que queremos: más verde, más sano y más justo”.

Integrantes del equipo

• Pablo Sánchez-Bayo (Universidad de Navarra).  Arquitecto y estudiante del Doble Máster Universitario en Arquitectura (MUA) y en Diseño y Gestión Ambiental de Edificios (MDGAE)

• María Sánchez-Bayo (UPM - UCM). Ingeniera agrónoma y estudiante del Máster en Estrategias y Tecnologías para el Desarrollo.

• Ismail Sadeq Dfaili (UPM - UCM). Relaciones internacionales y economista y estudiante del Máster en Estrategias y Tecnologías para el Desarrollo. 

• Ana Belén Torrejón (UCM - UPM). Relaciones internacionales y estudiante del Máster en Estrategias y Tecnologías para el Desarrollo.

• Julia Urquijo Reguera (UPM). Profesora de la Escuela Técnica Superior de Ingeniería Agronómica, Alimentaria y de Biosistemas (ETSIAAB) de la UPM, Departamento de Ingeniería Agroforestal.