En la Escuela de Arquitectura mayo no es solamente el mes de los exámenes, sino que también está repleto de entregas, debido a que sus grados en Arquitectura y Diseño complementan la formación teórica y práctica. Los talleres se llenan de maquetas y proyectos y hay presentaciones en todas las esquinas. Entre el 17 y el 19 de mayo se llevaron a cabo las entregas finales de los proyectos de los alumnos de 2º, 3º y 4º de Arquitectura.
En 2º de Arquitectura presentaron su proyecto final en el aula magna de la Escuela. En pocos minutos los estudiantes resumieron sus propuestas. Tenían que desarrollar una iglesia parroquial en Ardoi. En los últimos años esta zona de Zizur Mayor ha crecido y dentro de la ordenación se propone la construcción de una iglesia y un pequeño centro parroquial.
La atención de este último ejercicio del curso se dirige hacia la capacidad significante de la arquitectura y a su condición de objeto cultural capaz de transmitir contenidos. El propósito de este ejercicio es excitar la capacidad del alumno para proponer, a partir de un proyecto de carácter religioso y con una necesaria significación hacia el exterior, el reto de diseñar un objeto dotado de cierta complejidad.
En 3º trabajaron con la Fundación Serralves, una institución portuguesa de prestigio y reconocimiento internacional que promueve e impulsa la difusión del arte contemporáneo. Se sitúa en Oporto y recientemente han comenzado un programa de intervenciones en sus jardines. En consonancia con estas actuaciones, la Fundación se ha propuesto la creación de un centro de divulgación artística cuyo objetivo es el de contribuir a transformar su contexto a través de la escultura y la arquitectura.
Los estudiantes plantearon la construcción del nuevo edificio en el que las características del solar, que consideraban cuestiones fundamentales para el desarrollo del proyecto, eran: el estudio de la topografía, el arbolado y vegetación existente; la implantación del edificio sobre el terreno y su relación con el contexto; y la proposición de un nuevo paisaje.
En 4º desarrollaron un proyecto en el que la docencia de Design Studio VI se integra con la de Urbanismo IV en un trabajo junto al recinto ferial de Granada, en el barrio de Almanjáyar. Los estudiantes visitaron la ciudad en un viaje académico en enero y conocieron las zonas de trabajo.
La propuesta quería lograr una transformación de una zona en proceso de reestructuración aprovechando un lugar y una posición estratégica dentro de la ciudad para crear un tejido urbano de usos mixtos. En definitiva, se pretendía el desarrollo de un ejercicio de regeneración urbana en el ámbito de Almanjáyar que atienda a los retos del futuro y que garantice un diseño urbano de calidad que pueda inspirar estilos de vida sostenibles para los futuros residentes y usuarios del lugar.