“Como arquitectos buscamos experiencias que se alineen con nuestra forma de percibir, sentir y entender la arquitectura. Experiencias que nos aporten valioso conocimiento y nos permitan encontrar sensibilidad, inspiración y conexión con nuevas herramientas, metodologías y referentes para pensar y proyectar arquitectura.
En esta búsqueda, estudiantes de México, Guatemala, Colombia, Ecuador y Perú emprendimos un nuevo camino en el Máster en Teoría y Diseño Arquitectónico de la Universidad de Navarra; un camino lleno de aprendizaje para crecer profesional y personalmente. Gracias a haber dado un paso en esta dirección, está siendo posible incursionar en el diseño arquitectónico y en sus teorías y, hoy, es una realidad que nos reta pero, a la vez, nos apasiona.
La primera parada fue Miami (a finales de septiembre), ciudad conocida mundialmente por su multicultural población, conexión artística y de diseño, por sus hermosas playas, su arquitectura y entretenimiento. En esta ocasión, gracias al nexo entre la Universidad de Navarra y la Universidad de Miami, participamos de la primera edición del Workshop de diseño arquitectónico, impartido en Miami mediante un taller intensivo durante dos semanas. Vivimos una experiencia bastante enriquecedora gracias a que nos enfrentamos a una problemática real de la ciudad en una de las estaciones de metro y bus más importantes, puesto que es un sector en donde se fusionan transporte, mar, museos, escuelas de arte y cultura.
Este Workshop de práctica proyectual fue dirigido por el arquitecto estadounidense Edward Baum, quien ha tenido una formación y trayectoria admirable con títulos de pregrado y posgrado de Harvard. Su ejemplo es digno de adoptar, pues su profesionalidad y calidad humana no tienen igual. Mediante críticas constructivas, él y los arquitectos Víctor Larripa, doctor de la Universidad de Navarra y profesor asistente de este taller, y Edgar Sarli, profesor de Taller de proyectos de 4º año con estudios de posgrado en Arquitectura y Diseño urbano en Harvard, lograron llenarnos de motivación y esfuerzo para potenciar cada proyecto presentado en el taller, obteniendo resultados satisfactorios. Además, tuvimos la oportunidad de compartir nuestras habilidades y capacidades con los demás, sin tener miedo a fallar al contar con un apoyo importante para superar los retos que se iban presentando.
Otra de las ventajas de esta experiencia radica en la fortuna de sumergirnos en la multiculturalidad. No solo aprendemos de los profesores, sino de la escuela de formación y de la cultura de cada estudiante. También, construimos conocimiento a partir de la reflexión y análisis surgido de las interacciones con el contexto en cada uno de los espacios visitados como el Distrito de Diseño, las zonas de arte urbano y contemporáneo, el museo PAMM, visitas a diferentes obras arquitectónicas, la ciudad y el campus universitario (que, a propósito, es un lugar impecable que brinda una vivencia más que agradable con su infraestructura y ambiente).
Además de estas importantes visitas, la experiencia del Workshop se complementa con otras actividades que aportan gran valor al proceso de aprendizaje. En nuestro caso, compartimos con los estudiantes de 4º año de Arquitectura, concibiendo metodologías diferentes a las de nuestra formación, dando como resultado apertura a la novedad; e hicimos parte del compartir de conocimiento con la conferencia de la firma Barozzi Veiga, estudio de diseño arquitectónico con base en Barcelona en donde se destaca su trayectoria formidable con diferentes proyectos en el mundo, la cual aportó mucho a nuestra formación y experiencia como arquitectos.
Finalmente, es preciso mencionar que el Workshop en Miami sin ninguna duda nos brindó gran conocimiento y momentos valiosos al ser una experiencia tan maravillosa y completa, se logra fomentar e integrar el aprendizaje obtenido que tiene como finalidad hacernos crecer como arquitectos, pero también como seres humanos inmersos en un contexto global para el que cada vez se necesita mayor preparación”.
