“El lograr una certificación ambiental garantiza que el edificio cumple con los estándares nacionales y/o internacionales, y que ha realizado una evaluación integral de sus procesos y de su impacto con el medioambiente.

Los estudiantes del Máster Universitario en Diseño y Gestión Ambiental de Edificios (MDGAE) disfrutamos antes de finalizar el curso de la semana de certificaciones. Estuvo formada por dos módulos, uno introductorio a la certificación de WELL y otro a la certificación BREEAM®, cada uno con casos prácticos para poder desarrollar los conocimientos adquiridos.

El primer módulo de la semana consistió en la introducción a WELL impartido por el Instituto Tecnológico de Galicia (WELL Market Partner). El curso tuvo una duración de 7 horas lectivas y tuvo como prioridad la salud y bienestar. Pasamos un 90% del tiempo en espacios cerrados y por eso estos tienen un gran efecto en nuestra salud, bienestar y productividad. La certificación WELL es un sistema de puntuación tanto para edificios como comunidades. Esto permite medir las características de los espacios aplicando estrategias para fomentar un estilo de vida activo y saludable.

El curso introductorio a WELL estuvo formado por presentaciones y ejercicios. Aprendimos los 10 conceptos evaluables tanto para vivienda como para hoteles y oficinas. Estos conceptos son: aire, agua, alimentación, iluminación, movimiento, confort térmico, sonido, materiales, mente y comunidad. Dependiendo del nivel de certificación puede ser bronce, silver, gold o platinum.

El módulo estuvo dividido en 3 bloques: Introducción a WELL, el proceso de certificación, las ‘features’ en WELL V2 y, por último, el caso práctico como ejercicio de evaluación. Nuestro caso práctico consistió en un trabajo en equipos de 4 integrantes y en un edificio ficticio que aspira obtener la certificación “WELL v2”. El objetivo de esta práctica fue determinar la puntuación final del edificio y clasificarlo. La última versión de WELL (V2) busca impulsar los ‘sustainable development goals’, es decir, su misión es la implementación de edificios y comunidades saludables desde una visión holística. 

El segundo módulo consistió en la certificación BREEAM® (Building Research Establishment Environmental Assessment Methodology). Es un método de referencia a nivel mundial para la evaluación y certificación de la sostenibilidad en edificios, es decir, un estándar técnicamente avanzado que fomenta mejores gestiones de construcción sostenible a través de procesos para medir y evaluar los niveles de sostenibilidad de edificaciones y desarrollos urbanos. Esta certificación beneficia al usuario con mayor calidad de vida y menos consumos, al planeta con menores emisiones e impacto ambiental, al propietario/inversor con mayor vida útil del inmueble y aumentando el valor del activo y, por último, al equipo de diseño, aportando un servicio diferencial y elemento de mejora de las propuestas iniciales.

El curso, al igual que el anterior, contó con una duración de 7 horas lectivas. Aprendimos que la metodología del certificado consiste en diez categorías: gestión, salud y bienestar, energía, transporte, agua, materiales, residuos, uso ecológico del suelo, contaminación e innovación. Se pueden distinguir 5 tipos de certificaciones: urbanismo, vivienda, nueva construcción, a medida y en uso. Cada proyecto evaluado puede obtener una puntuación final que se traduce en una escala de sostenibilidad de 5 estrellas.

Al finalizar las horas lectivas y sesión de dudas se pasó al caso práctico, de nuevo en equipos de 4 personas. Cada uno recibió una libreta con un caso práctico y nos organizarnos para revisar cada categoría y anotar el nivel obtenido. Al final comparamos los resultados con los de los demás equipos. Nos dimos cuenta que cada uno estábamos en los mismos resultados, solo hubo algunos puntos que variaron las respuestas. Fue muy interactivo por parte de los moderadores. Comparar las respuestas y analizarlas fue una experiencia muy enriquecedora para tener estos conceptos más claros.

Después de realizar el caso práctico y comparar las respuestas, pasamos a realizar un test rápido para evaluar lo aprendido durante la sesión. Para finalizar el curso y obtener nuestro certificado de participación, nos llevamos de tarea un nuevo caso práctico, en este caso de forma individual, misma metodología de trabajo, pero esta vez cada estudiante tomó de referencia un proyecto personal. Fue entregado y evaluado los 2 días siguientes.

En conclusión, estos días de lecturas y ejercicios prácticos sobre estas diferentes metodologías de certificación me dejan un aprendizaje muy importante sobre lo valioso que es el bienestar humano, la importancia de volver al origen de la arquitectura que es la creación de un refugio para el ser humano y no solo añadir el valor del bien inmueble, sino del bienestar y salud de sus ocupantes. Un entorno saludable mejora el rendimiento y bienestar, qué importante es invertir en el activo más importante: las personas”. 

Texto escrito por Marycarmen Murillo Frías, estudiante del Máster Universitario en Diseño y Gestión Ambiental de Edificios (MDGAE).