“Los estudiantes del Máster Universitario en Arquitectura de la Universidad de Navarra tuvimos la oportunidad de participar en un viaje de estudios a Pamplona. Allí pudimos conocer los orígenes del centro y entender el prestigio internacional de la institución, además de la centralidad de la arquitectura y el papel esencial que esta desempeña en las distintas disciplinas que la conforman.
El viaje comenzó el jueves 28 de septiembre, cuando nos reunimos en el Hotel Puerta América de Madrid, donde nos esperaban los dos autobuses que nos llevarían a Pamplona. Llegamos alrededor del mediodía y, tras dejar las maletas, nos dirigimos al Edificio Central del campus de Pamplona de la Universidad para iniciar nuestras actividades. Nuestra primera parada fue realizar una foto de grupo en las impresionantes escaleras del Edificio Central. Fuimos recibidos por Rosalía Baena, la vicerrectora de Estudiantes y Relaciones Internacionales, en el Salón de Grados, donde nos dio la bienvenida y nos brindó información sobre la Universidad, sus orígenes y los valores que caracterizan a la institución desde su fundación.
Después de la recepción, nos dirigimos al campus para disfrutar de un almuerzo al aire libre. Sentados en los jardines del campus, organizamos una salida para vivir la tradición del "juevintxo" (jueves de pintxos), una experiencia muy característica de Pamplona que no podíamos perdernos.
Por la tarde, tuvieron lugar tres visitas guiadas a los edificios más emblemáticos del campus. Comenzamos en la Escuela de Arquitectura, un edificio diseñado por el grupo de arquitectos Aguinaga y Asociados que recibió el Premio Nacional de Arquitectura de Ladrillo en 1980. Allí, Javier Sáez Gastearena, miembro del Departamento de Teoría, Proyectos y Urbanismo, nos guió por las instalaciones. Lo más impresionante de este edificio es su estrecha relación con los estudiantes y el propio Grado en Arquitectura: las aulas se organizan de acuerdo con el plan de estudios, los espacios son diáfanos y llenos de luz natural, lo que crea un entorno idóneo para aprender y crear.
Nuestra siguiente parada fue la Facultad de Comunicación de Ciencias Sociales, edificio diseñado por el estudio de arquitectura VICENS+RAMOS, galardonado con varios premios de arquitectura. Fuimos guiados por Juan Luis Roquette Rodríguez-Villamil, también miembro del Departamento de Teoría, Proyectos y Urbanismo. Durante la visita, Juan hizo hincapié en cómo la iluminación desempeña un papel central en su diseño, y en su simbolismo sobre la comunicación y el papel de sus estudiantes en la sociedad.
Para concluir las visitas del jueves, visitamos el Museo Universidad de Navarra y accedimos a la exposición ‘Una tierra prometida. Del Siglo de las Luces al nacimiento de la fotografía’, junto con una guía con la que repasamos las distintas definiciones de la realidad desde la tradición de la ilustración científica, contrastando con la aparición del método fotográfico y su evolución hasta mediados del siglo XIX.
Tras un día lleno de aprendizajes, nos dirigimos a nuestros alojamientos. Después, nos encontramos de nuevo en el famoso Bar Gaucho, donde disfrutamos de sus pintxos más populares como el de foie y el de huevos trufados.
El segundo día, viernes 29 de septiembre, comenzó con una visita a la nueva sede de la Mancomunidad de la Comarca de Pamplona, en el antiguo Convento de las Salesas. Este edificio es de especial interés, puesto que han conseguido conservar su valor arqueológico otorgándole a la vez funcionalidad y convirtiéndose en un lugar importante para la comunidad. Finalmente dimos un último paseo por las calles del centro histórico de Pamplona antes de regresar a Madrid.
En resumen, el viaje a Pamplona con la Universidad de Navarra fue una experiencia enriquecedora en la que exploramos el campus y conocimos su historia arquitectónica, pero también tuvimos la oportunidad de acercarnos a la cultura y gastronomía local. Agradezco a la Universidad por esta oportunidad y aliento a otros estudiantes a participar en este tipo de experiencias para enriquecer su educación”.
Texto escrito por: Pilar Maté Sanjuán, estudiante del Máster Universitario en Arquitectura.
Fotografías de: Elena Coronado Ramos, estudiante del doble Máster Universitario en Arquitectura y Real Estate.
