Inteligencia y la creatividad
al servicio de la persona
El avance de la tecnología ha supuesto una enorme revolución. Ha transformado la vida cotidiana en todos los sectores, desde la medicina hasta las comunicaciones, pasando por los negocios, el comercio, el transporte… Asimismo, ha dado la vuelta a la forma de trabajar y de relacionarse con familiares y amigos.
La innovación como medio
Desarrollar
tecnología también presenta desafíos a la sociedad que no se pueden pasar por alto. La tecnología no es un fin para las personas, sino un medio para ayudarles a vivir mejor a través de la optimización y la simplificación de procesos.
Uso responsable
Reflexionar
de forma crítica sobre cómo empleamos las innovaciones nos permitirá fomentar su uso responsable. Un uso dirigido a la innovación social, la producción y difusión del conocimiento, la generación de conexiones significativas para la gente y la promoción de sociedades más justas, que garanticen la igualdad de oportunidades para todos los ciudadanos.
Superar barreras
Entender
cómo la creatividad humana puede aplicarse tanto a la técnica, como al arte y la cultura para la creación de vínculos. La capacidad de innovación y de creatividad permite ver más allá de lo establecido. En este sentido, las personas somos capaces de crear nuevos significados a objetos y situaciones ya existentes, comprenderlas, favorecerá la coherencia, superando el desacuerdo.
Al servicio de la persona
Concebir
la tecnología como fruto de la inteligencia y la creatividad del ser humano. Entender mejor cómo este puede innovar y aportar enfoques diferentes también servirá para inspirar soluciones mejores y más respetuosas con la dignidad de la persona, especialmente en el campo de la inteligencia artificial.