La propuesta de intervención se sitúa en la ciudad neerlandesa de Ámsterdam, que aún no siendo la capital administrativa del país es el núcleo más extenso. La ciudad nace en el siglo XIII como un pequeño pueblo de pescadores a orillas del río Amstel. Gracias al comercio Ámsterdam se convierte en uno de los puertos más importantes de Europa. Esto va a tener gran repercusión en el trazado de su urbanismo. Al estar construida sobre terrenos pantanosos y siendo tan importante la pesca y el comercio marítimo, se crean con el tiempo una serie de anillos concéntricos de canales que empiezan a definir la ciudad tal y como es hoy en día. La zona central del conjunto es la más antigua de la ciudad y se denomina Barrio Rojo. Es aquí donde se encuentran los edificios más antiguos. En el perímetro de este barrio se sitúa el proyecto.

La idea principal tiene como objetivo realizar una renovación completa del actual mercado de las flores de Ámsterdam, convirtiéndolo así en un lugar digno para la venta de este producto icónico para el país. El nuevo mercado se dispondrá en 3 niveles diferentes despejando así las orillas del canal Singel, invadidas actualmente por los deteriorados puestos de venta, y volviendo al concepto original del “mercado flotante” sobre el propio canal.

Las flores en Holanda, son algo muy representativo ya que se la conoce como la “floristería del mundo”. Desde el año 1862, el Mercado de las Flores de Ámsterdam no es sólo un atractivo turístico, si no que es el lugar preferido por los locales para comprar flores y plantas. En sus orígenes, hace más de 140 años, llegaban a diario hasta Bloemenmarkt cientos de embarcaciones con plantas y flores para su venta. El gusto de los holandeses por las flores es algo que nunca han perdido.

Hoy en día apenas ya no se nota que en sus orígenes era un mercado flotante, ya que ahora está situado en plataformas y barcazas en mal estado sujetas al borde del Canal Singel. Por eso este proyecto pretende recordar los orígenes del mercado. Una barcaza flotante en el canal Singel. Formas naturales y sencilas que evoquen las antiguas velas y pétalos de flor con mástiles de las barcazas de antaño.

Se plantea renovar todo el espacio de venta actual, además de dotaciones nuevas complementarias al mercado actual. Como un centro cultural donde se permitirá conocer la historia de este mercado además de toda la historia relacionada con la flor en Holanda.

Más proyectos