Resumen:
Después qué y cómo se entiende el término integrar, se hace un recorrido por la filosofía, la psicología, la neurociencia, comprobando que existe un lenguaje común compartido que es reflejo de que de hecho todas ellas están participando de algo mayor a ellas mismas: la integración, clave para que todas ellas puedan crecer en refuerzo mutuo. Las consecuencias epistemológicas de ello son importantes: cuando cualquier disciplina progrese asumiendo la clave de la integración podrá encontrarse con las otras y precisamente gracias a su relación con las otras ella podrá crecer. Presentando finalmente las repercusiones teológicas de esta dinámica de integración.