2015_03_03_DER_Luis_de_Guindos

El ministro de Economía y Competitividad, Luis de Guindos, presumió de datos macroeconómicos durante su conferencia Bases sólidas para el crecimiento, que impartió en el auditorio del Museo Universidad de Navarra. El ministro destacó que la economía española "ya no es el problema de Europa, sino la que más crece". Y apuntó que la previsión de crecimiento del 2,4% para este año es "muy prudente", y que probablemente el Gobierno la modifique al alza el próximo mes de abril.

A pesar de la buena marcha de las grandes magnitudes, de Guindos reconoció que nuestro país "ha salido de la recesión, pero no de la crisis", si bien "las perspectivas ahora son diferentes": "Nadie duda de que en estos momentos España es un país competitivo", recalcó durante su discurso en el acto organizado por el Banco Santander y el Diario de Navarra.

Esta nueva situación se debe a las medidas tomadas por el Gobierno, pero también al diferente contexto internacional. El ministro destacó que la evolución del precio del petróleo "es muy positiva para la economía española", así como la trayectoria de las políticas monetarias, que ha depreciado el euro frente al dólar hasta situarlo a menos de 1,15 frente al 1,4 en el que estaba la moneda única hace unos meses. Una situación que lleva a un escenario nuevo, "el de los tipos de interés negativos", circunstancia a la que de Guindos restó importancia, ya que "la inflación también está en negativo", por lo que es un dato positivo para la "economía real".

El ministro destacó que España "lleva siete trimestres en positivo" y "cuatro o cinco trimestres creando empleo", circunstancia que comparó con la "situación límite" del verano de 2012, cuando la economía española estuvo "al borde de la intervención". "El mundo no veía a España con capacidad para arreglar sus problemas, pero se evitó el rescate, que hubiera supuesto un mazazo para nuestra autoestima", destacó.

Extensión del rescate de Grecia

En declaraciones a los periodistas, de Guindos aseguró que el Gobierno de España va a "colaborar" con Grecia desde la "solidaridad" y la "flexibilidad". Se mostró convencido de que el país heleno va a hacer frente a sus pagos, va a aceptar las condiciones del rescate y no va a tomar "medidas unilaterales" que podrían afectar a los socios de la Eurozona. En su opinión, "lo fundamental es que Grecia vuelva a crecer". Preguntado por la relación del Gobierno Rajoy con el de Grecia, aseguró que dentro de las fronteras europeas "no hay enemigos".