Resumen:
Actualmente la mayoría de las empresas cumplen los requisitos ambientales que exigen los clientes y la legislación
vigente. Sin embargo, no es fácil ir más allá y alcanzar la excelencia ambiental. Es aquí donde entra el concepto de
eco-innovación. Todavía no existe una definición clara de este concepto y es importante aclarar su significado para
poder avanzar. Por lo tanto, a través de una investigación exploratoria, este artículo expone los diferentes enfoques
de eco-innovación y aclara el concepto, dándole una perspectiva dinámica. Es importante destacar, que la ecoinnovación
no tiene por qué tener como objetivo inicial la mejora ambiental; sino que puede partir de innovaciones
que se realizan en los productos, procesos o servicios de la empresa. Esta definición se debe enmarcar en un campo
de mejora continua, de tal forma que se busque de manera incremental, nuevos márgenes de mejora; ya sea en los
productos, procesos y/o servicios y como consecuencia en el medio ambiente; o por el contrario, en aspectos
ambientales y como consecuencia en los productos, procesos y/o servicios. Por otro lado, la eco-innovación está
muy ligada al eco-diseño y a la eco-eficiencia. A través del eco-diseño se puede llegar a la eco-innovación, pero hay
que tener en cuenta que para que el producto/servicio sea rentable hay que analizar la eco-eficiencia que se centra en
el diseño de los procesos.